La tensión entre Washington y Caracas volvió a escalar luego de que cinco aviones militares estadounidenses fueran detectados este jueves sobrevolando zonas cercanas a la costa venezolana
El episodio se produjo en un contexto de creciente presión militar en el Caribe y profundizó los temores a un conflicto de mayor escala en la región. La información fue extraída según C5N.
Un operativo aéreo que encendió alarmas en Caracas
De acuerdo con plataformas de monitoreo como Flightradar24, uno de los aviones identificados fue un Boeing RC-135, especializado en tareas de inteligencia electrónica y registrado bajo el indicativo ALBUS39. La aeronave, junto a otras cuatro unidades orientadas al reconocimiento y vigilancia estratégica, realizó maniobras en el espacio aéreo internacional, a escasa distancia del estado venezolano Delta Amacuro, limítrofe con Guyana.
El movimiento fue interpretado como una nueva señal de presión militar de Estados Unidos hacia Venezuela, especialmente a la luz del creciente despliegue estadounidense en el Caribe.
La “Operación Lanza del Sur” y el refuerzo militar en el Caribe
La actividad aérea se sumó a la llegada del portaaviones Gerald R. Ford, el más poderoso de la flota estadounidense. En paralelo, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, anunció en su cuenta de X el inicio de la denominada “Operación Lanza del Sur”, una misión que —según afirmó— busca proteger al país de “narcoterroristas” y combatir el tráfico de drogas en el hemisferio occidental.
Aunque no se brindaron detalles del operativo, la declaración encendió aún más las alertas, en un escenario donde Estados Unidos ya venía reforzando su presencia militar contra embarcaciones que acusa de transportar drogas desde las costas de Venezuela y Colombia.
Campañas militares, denuncias y falta de pruebas
Desde septiembre, la Casa Blanca sostiene que intercepta embarcaciones vinculadas al narcotráfico. Sin embargo, según la información difundida, no se han presentado pruebas públicas ni se han identificado los tripulantes de las lanchas destruidas. En los últimos dos meses y medio, se contabilizan 21 operaciones letales y al menos 83 personas fallecidas bajo estas acciones.
A esto se sumó un reciente ejercicio de fuego realizado por Marines estadounidenses a pocos kilómetros de la costa venezolana, en una maniobra que Caracas calificó de provocación directa.
El Cartel de los Soles y nuevas sanciones contra Maduro
Como parte de esta escalada política y militar, el Departamento de Estado designó formalmente al Cartel de los Soles como organización terrorista extranjera, acusando al presidente Nicolás Maduro y a altos mandos de liderarlo. La medida entrará en vigencia el 24 de noviembre y habilitaría a Washington a avanzar con acciones judiciales, financieras e incluso militares.
El gobierno venezolano negó nuevamente cualquier vínculo con el crimen organizado y consideró estas acusaciones como un intento de justificar una intervención. La presión estadounidense también incluyó elevar a USD 50 millones la recompensa por información que permita detener al mandatario.
El sobrevuelo de aviones militares estadounidenses cerca de Venezuela profundizó un clima de extrema tensión regional. Mientras Washington endurece su postura y avanza con nuevas sanciones y operativos militares, Caracas denuncia un intento de desestabilización. La región mira con preocupación un conflicto que parece lejos de moderarse.




