Walter Roberto Lefipán, conocido como “Coma”, recibió una condena firme de 3 años y 9 meses de prisión efectiva tras un juicio abreviado.
El acusado reconoció su culpabilidad en un asalto violento en Puerto Madryn y en múltiples intentos de extorsión cometidos desde la cárcel, reparando económicamente a las víctimas. La sentencia, informada por la Fiscalía, también declaró su reincidencia y ordenó el decomiso del celular utilizado para los delitos.
El violento asalto en Puerto Madryn
El 17 de noviembre de 2021, en un departamento de la avenida Roca en Puerto Madryn, se consumó el principal hecho por el que se condenó a Lefipán. Según la investigación liderada por el fiscal Jorge Bugueño, la víctima fue sorprendida al ingresar a su hogar. Dos hombres la redujeron por la fuerza, la ataron con cables y la golpearon, mientras le sustraían dinero, documentación personal, tarjetas bancarias y un teléfono celular. Un tercer cómplice aguardó en un vehículo utilizado para la fuga, cumpliendo funciones de vigilancia. Este episodio de robo agravado fue el eje del proceso penal.
La trama de extorsiones desde la cárcel
En el mismo juicio abreviado se incorporaron tres hechos de extorsión en grado de tentativa, cometidos entre junio y agosto de 2020. La modalidad operaba a través de perfiles falsos en redes sociales que suplantaban identidades de mujeres jóvenes. Una vez establecido el contacto, las víctimas recibían mensajes y audios intimidatorios de personas que se hacían pasar por familiares de supuestas menores de edad, abogados e incluso fiscales. Estos individuos exigían sumas de dinero a cambio de no formular denuncias penales falsas o de evitar supuestas órdenes de detención, una estrategia delictiva que Lefipán ejecutaba desde dentro del sistema carcelario.
Juicio abreviado y condena efectiva
Frente a la evidencia, Walter Roberto “Coma” Lefipán optó por un juicio abreviado, instancia en la que reconoció plenamente su responsabilidad en los hechos. Esta aceptación de la culpabilidad y la posterior reparación económica a las víctimas fueron factores clave en el proceso. El tribunal dictó una sentencia de 3 años y 9 meses de prisión efectiva, una pena que no admite suspensión condicional. La sentencia, tal como reportó el medio Infobae, incluyó además la declaración formal de reincidencia y el decomiso del teléfono celular utilizado como instrumento para cometer los delitos de extorsión.
El caso del “Coma” Lefipán ejemplifica cómo operan las redes delictivas que combinan violencia física con extorsión psicológica, incluso desde detrás de las rejas. Su condena efectiva marca un precedente en la lucha contra estos delitos que siembran temor en la comunidad. informo el medio Jornada.




