En el aniversario de Cholila homenajeamos al Tropillero Don “Pepe” Juan José Hueche
Historias de un Tropillero que fundó los desfiles gauchos en Cholila
Fundación de los desfiles gauchos en Cholila
Juan José Hueche fue el primero en realizar desfiles de caballos en cholila hace 20 años más o menos a esta parte, y hoy en día es el atractivo de los aniversarios de Cholila el 15 de Diciembre.
Pepe Hueche desfilandojunto a su nuera Vivina Ruiz de Hueche en el aniversario de Cholila antes que la Plaza central tenga asfalto.
Juan José Hueche Poblador Originario de Cholila, Tropillero de oficio, Trabajador Rural, hijo de Don Juan Hueche, chileno, y de Adela Rocha nacida en Trevelin.
“Pepe” Hueche nació en cholila el 12 de Agosto del año 1942 en la punta sudoeste del Lago Lezana
Pepe Hueche en los años 80″ preparando los Caballos para emprender rumbo a las «veranadas».
Don “Pepe” es casado con Irene Soto, tiene cinco hijos, Jorge, Claudio, Andrés, Silvia, y Emi, actualmente vive en el Pueblo de Cholila en el “Rincón” Luego de jubilarse en la última estancia en donde trabajó.
En su vida como Tropillero Pepe realizó dos viajes a Chile, cinco a Bariloche, y varios a Esquel y zonas aledañas, además de trabajar en varias estancias con ganado, y en la caza de animales salvajes como el zorro y de la liebre para la venta de sus cueros.
Don Jose Hueche en la actualidad con la «petisa» que tiene para que sus nietos disfruten de cabalgatas.
Primer viaje Tropillero de Don “Pepe” Hueche
El niño Tropillero
El tropillero Don “Pepe” Hueche nos comentó que la primer tropa que arrió fue a la edad de 12 años desde Cholila hacia Esquel, “cinco días tardaban por la huella del Lepa” dice.
“Quien me inició en este trabajo fue el finado «Willhoveer», llevamos una tropa de toros para el poblador Delpadro a la zona del valle chico en Esquel. Con lo que gané compré una flauta y un reloj a cuerda que tenía una campanilla linda, a la vuelta nos vinimos por la cortada, «Will» era un buen hombre a mis hermanas les traía caramelos y yo me vine tocando la flauta que compré hasta cholila.”
Es llamativo y algo sobrenatural que tan solo un niño de 12 años se convierta en tropillero arriando en su primer viaje nada más y nada menos que toros por un camino de cerca de 100 km, estos contrastes de la vida nos replantean la visión de nuestro presente.
Arreando Capones
“Sacamos otro arreo de Cañadón Grande de Leleque para atrás hacia valle chico Esquel llevamos 600 capones, de la Estancia de “Chasman”, fuimos solos con Efraín Luna de Cholila. En la entrada de Esquel hicimos campamento antes de llegar porque corría mucho viento, el lanar no es como el vacuno, es asustadizo y es más lerdo para caminar así que se tarda más y hay que tener más cuidado.”
Mi perro el “Dormilón”
“Menos mal que me ayudaba mi perro, que se llamaba Dormilón, que perro gueno, un perro grandote y dormilón pero gueno cuando se despertaba pa´ trabajar.”
Tropeando con Don José Sáez
“A los 18 años fui de tropillero a Chile con Don José Sáez llevábamos vacunos de la Estancia “El Manantial” de Andrés Acheritobehere hacia Bariloche tardábamos con tropas por Maitén 9 días. Los vacunos que llevábamos eran vendidos por Don Andrés Acheritobehere a un propietario de carnicerías apellidado “Arroyo”. De vuelta tardábamos 3 días, en la tropa se llevaban más de 100 animales vacunos y más de 200 ovejas. En enero rumbeábamos por la “bayas” llevando las vacas desde Cholila pasando por Ñorquincó hasta Bariloche pasando antes por Pilcaniyeu.”
Aventuras del Tropillero
“Recuerdo que en Ñorquincó agarramos una avestruz, en la zona del martillo es un alambrado en donde teníamos un alojadero, bajo un avestruz a tomar agua y se llena el buche de agua y no pueden correr, así que los perros la alcanzaron, la corrían como si fuera un pavo, pero el avestruz tiene sus patas con garras y un perro fue pateado por el avestruz ahí se dieron cuenta que no era ningún “pavo”, pero igual la agarraron.”
Tropillero Internacional
Historia de un viaje a Chile
“El viaje duraba tres meses, salíamos en enero de Cholila y llegábamos en marzo a Chile, todo el verano de vacaciones a la vuelta tardábamos 15 o 20 días porque veníamos sin ganado y rápido para ver a nuestra familia, y a nuestros perros los traíamos en pilchero le poníamos grasa en sus patas porque se lastimaban de tanto caminar los primeros días, después se acostumbraban, se les metían flechilla en las patas y la vista, pero se las aguantaban y seguíamos viaje, ellos también extrañaban el “pago”.
El trabajo del Tropillero y su herramienta
Como dice Don “Pepe” Hueche La herramienta principal del tropillero es el caballo “sino con que vas a trabajar”, la herramienta es el caballo y el amigo el perro dice alguien que sabe de lo que habla.
Horas de trabajo diurnas del Tropillero
“Por cada tropa que llevábamos iban más o menos 12 troperos por viaje era un trabajo bastante bravo siempre faltaba gente, en la noche se asustaban los animales y teníamos que hacer ronda y en la noche se hacía difícil atajarlos porque te pasan a llevar, si había callejón no había problema porque agarraban la huella, pero si era camino abierto se disparaban y se hacía una estampida.”
Embarque de la tropa y paseo de compras de los tropilleros
“Los animales se embarcaban en Osorno en la estación de Chirre en el tren y los llevaban a Santiago de Chile. De ahí queda retirado ahí íbamos en colectivo de Chirre hasta Osorno a comprar ponchos y ropa, ahí sabíamos andar asustados por la ciudad, yo andaba a la siga de los otros.”
Tortas Fritas Tropilleras
“Apenas aclaraba salíamos en tropa y hacíamos campamento temprano antes que anochezca para preparar la comida, carneábamos y con al cuero del capón o el vacuno los poníamos la montura “cangalla” dada vuelta que nos servía de “fuentón” para amasar y preparar las tortas.”
El pasó Samoré
“Hacíamos dos tropas, una más adelante y otra más atrás, la cola era larga y el bramerío también, pasábamos por el paso “Samoré” adonde está el volcán Puyehue, en el año 1960 reventó el volcán, siempre humeaba, cuando pasábamos por ahí.”
Boliche al paso para los troperos
“Íbamos por el paso Limay por la estancia de Don «Jones», pasando Bariloche, yo me acuerdo que antes había un “bolichito” en paso Limay y pasábamos a comprar tabaco, ginebra, vino, algunos se tomaban y se desconocían y peleaban.
Unas de esas peleas fue la de “Pichuco” Urbina con Carlos Barrera, se trompeaban por los caballos siempre por quien era mejor.”
El Peligro de los Tropilleros
“La pasada de los límites para Chile era la más jodida entre cañales, lengas y coihues los animales pasaban de a uno, algunos animales lastimados los dejamos encargados en los campos de esa zona, algunos los teníamos que degollar y cortar el cuero con la marca para comprobar que el animal se había muerto en el camino, eso se lo presentábamos a los que compraban los animales.
En esta pasada nos lastimábamos muchos con las ramas, con los apretones de los animales.
En chile llovía todos los días, en Chile siempre andaban con ponchos, nosotros en camisa y campera cuando llovía no se podía parar seguíamos, no es un agua helada así que seguíamos y parábamos solamente a secar la ropa a fuego, la camisas eran pura tierra gruesa de mugre.
No sé porque nunca nos agarramos ninguna pulmonía, Dios nos ayudaba, no andábamos haciendo nada malo, a la vuelta nos comprábamos poncho castilla para atajar los “aguaceros”.
Me acuerdo de un apretón que me dio un caballo en la “Estancia de Torres” en donde el caballo quebró una pierna trabajando, los animales tienen mucha “juerza”.”
En Chile nos atendían muy bien
“Los Chilenos eran muy buena gente nos atendían muy bien, gente muy atenta, muy familiar allá a los argentinos nos aprecian, lástima que acá muchos discriminan al Chileno pero ellos no fueron así con nosotros.
A Ruperto Ruiz que nos contaba muchas historias de Cholila, vivía en donde Basso y de ahí lo desalojaron por ser Chileno.”
Cazador y Tropillero en Dictadura.
“Cazaba pumas en el Lago Lezana, y cuando estuve trabajando en la Estancia los “Murmullos” agarré como 12 pumas, cuidada las ovejas ahí, estuve como 10 años cuando era de doña María Nataine, cuando estaban los militares.
No pagaban bien, más o menos, trabajaba interesado ahí ,sacaba un tanto por ciento de lo que trabajaba de los animales de la lana, tenía que trabajar un año para poder tener plata, me la rebuscaba, cazaba zorros, liebres y cuando no tenía sacaba crédito adonde Nataine que me cobrara caro”.
De Peón en la Estancia del “Francés”
“Estuve trabajando en la Estancia “Bajada del Radal” del Francés, ahí me jubilé, hace cinco años más o menos, ahí cazaba zorros porque hay muchos, los agarraba con los perros, con la trampa bien poco. Pero ya no es como antes, no te pagan nada, ahora ya no vale la pena agarrar un zorro, cuerearlo, estaquearlo por 100$ pesos.
Había tanto ciervo en esa Estancia que hasta suelen andar con las vacas pastando juntos, andan guanacos también y hay una hermosa laguna en donde sale mucho pejerrey. Una vez tenía un montón de cueros de zorros estaqueados, y llegó el “francés” y me preguntó: “¿por qué tanto zorro muerto?, y le respondí: “lo cazo porque se comen los corderos”, y el francés me dijo: ¡bicho salvaje tiene que comer!, entonces le dije: «no cazo más entonces»!.
Al tiempo la señora del “francés” mientras yo estaba en un galpón me preguntó si los zorros mataban muchos corderos y le dije que sí, entonces me dijo porque no los caza entonces y le dije porque el Patrón me dijo que ¡bicho salvaje tiene que comer!.
El Patrón era bueno (el francés) nos regalaba para las fiestas un cordero a cada peón, hasta una vez hicimos una película en la veranada, el patrón vino para hacer una película de los trabajo del campo.”
Por Dario Fernández