La violencia en Chubut contra las mujeres no para. Tenemos una ley vetada y otras no aplicadas por el Poder Ejecutivo. Un caso más, un ejemplo más… de lo que no debería haber sucedido si la ley castigara a personas como José Nemesio Gallardo.
Un hombre que doblegó a la madre de sus hijos con los puños. Una mujer con miedo, una madre que vivió aterrorizada 10 de los 11 años que compartió con esa persona violenta, sin escrúpulos, incapaz de sentir piedad o respeto por el género, sin tener la más mínima idea que no es un hombre valiente si no un cobarde que ajustó el puño y puso agallas con alguien que no podía defenderse y volvemos a lo mismo… miedo, vergüenza, amenazas, falta de recursos, hijos, etc.
Lo mismo, todos los días, cualquier momento, cualquier palabra que se diga desafortunada traen golpes y más golpes y con ellos, hijos criados en violencia, y en Chubut seguimos proponiendo leyes que después se ignoran… me pregunto qué se hace para el cuidado integral de la familia. Les recuerdo que a fines del 2016 el Sr. gobernador Mario Das Neves vetó le Ley de Emergencia Social de violencia de género.
Quiero solidarizarme y decirle a Raquel Hartwig, que cuente con mi apoyo y el de todas las que estamos en la lucha de “Ni una Menos”. Esta persona, si es acaso que se le pudiera llamar así, no fue citado ante la justicia y ella, a pesar de haberse atrevido a denunciarlo, vive con terror ¿Por qué? Es la pregunta del millón y lamentablemente seguimos dando vueltas en redondo sin tomar el camino correcto. Y la Justicia debe garantizar el debido proceso… Entonces digo en voz muy alta, para que les llegue y puedan escucharme, que me ofrezco ante aquellos que tienen la ley y el poder de gobierno en sus manos, que no desestimen más la lucha #NiUnaMenos y me vuelvo a ofrecer a trabajar juntos y darle a José Nemesio Gallardo y a otros igual que él, lo que merecen y también a todas las Raquel, que sufren semejante injusticia a traerles paz, darles un tiempo de recuperación, contención para sus hijos, en fin, regalarles la posibilidad de una vida sin golpes, sin sometimientos, llena de palabras que puedan decir, de gritos que puedan pegar y de todo lo que estuvieron viendo a través de la ventana y no pudieron tener.
Tristeza y amargura, me dan estas situaciones y ganas de hacer, de moverme más y más, cada día, sin perder tiempo pero tendrían que ayudarme ¿Saben? En lugar de inventar cosas y fijarse si soy o no, si soy el GPS de alguien o tal y cual cosa, pienso que un diputado de una provincia es de una provincia y no de un solo sector, ¿Qué quieren? ¿Que sea calladita y obediente sin hacer nada desde mi lugar por la gente de esta provincia? No comprendo la necesidad de calificativos y de sugerencias para sacar conclusiones en épocas donde el concepto de mujer es luchar por la igualdad y activas en toda índole social, ya no más callada y sumisa por que no contribuye a la erradicación de la violencia de género.
La violencia simbólica contra la mujer termina validando la violencia física. Porque no invertimos esas palabras dañinas que el pueblo ya no quiere escuchar y movemos un poquito las cosas ¿eh? Ustedes que son la ley y poder, vayan por esa bestia y denle lo que merece, que otros vean que por una vez en la vida la justicia fue justa y entonces las cosas se inviertan y antes de levantar el puño sean ellos, los que tengan miedo ¿Qué les parece?…