El estadio ‘Monumental’ de Núñez, escenario que albergó jornadas gloriosas de la historia de River Plate, y también soportó algunos tragos amargos, cumple hoy 80 años, casualmente en un año mundialista, algo sin dudas especial ya que allí se consagró campeón del mundo Argentina en 1978, en el primero de sus dos títulos.
El miércoles 25 de mayo de 1938, más allá de los festejos de una nueva fecha patria, los argentinos, y en especial los porteños, se despertaron ansiosos con la novedad de que esa tarde se inauguraría el nuevo estadio de River.
Era una época en el fútbol argentino, profesional desde hace unos años, que convocaba a multitudes, en su gran mayoría varones, que concurrían a los estadios vestidos de traje y sombrero, viajando en colectivos y tranvías como medios de transporte.
El nuevo escenario, conocido popularmente como ‘Monumental’, pero cuyo verdadero nombre es ‘Antonio Vespucio Liberti’ en homenaje al visionario presidente de la entidad, está ubicado en el porteño barrio de Belgrano y no, como se dice comúnmente, en Núñez.
Aquella inauguración, calificada por la revista El Gráfico como «solemne y grandiosa», contó con numeroso público en las tribunas, y la entrega de una bandera argentina de seda costeada por un grupo de asociados, las palabras de las autoridades, la entonación del Himno Nacional Argentino y la marcha oficial del club.
Luego se disputó un partido amistosos con Peñarol de Uruguay, en el que River se impuso 3-1 y alineó a figuras de la talla de Carlos Peucelle, Jose María ‘Charro’ Moreno y Adolfo Pedernera.
Tres días después y por el torneo oficial, el ‘millonario’ perdió en ese escenario 4-2 ante Independiente que, a la postre, saldría campeón con futbolistas como Arsenio Erico, Antonio Sastre, Vicente de la Mata, Carlos Bello, Raúl Leguizamón, entre otros.
En 1934, tres años antes, River, por iniciativa de Liberti (cuatro veces presidente), decidió comprar unos terrenos considerados inhóspitos, y que alguna vez habían sido ganados al Río de la Plata, en la hoy avenida Figueroa Alcorta (que por esos tiempos se llamaba Centenario) y Udaondo.
River compró parte de esos terrenos con un préstamo del Banco Hipotecario y el resto fueron cedidos por la Municipalidad de Buenos Aires.
El club que ya tenía el apodo de ‘millonario’ por las costosas contrataciones de futbolistas, jugaba hasta ese entonces en una cancha situada en un amplio predio ubicado en la avenida Alvear (hoy Del Libertador) y Tagle, que ya resultaba chica para albergar a su populosa hinchada.
La historia del club también registró un paso, en sus comienzos, por el barrio de La Boca (en Pinzón y Pedro de Mendoza), en un predio conocido como ‘la Carbonera Wilson’, y también hubo un tiempo en Dock Sud y un alquiler de la cancha de Ferro.
El diseño original del «Monumental» contemplaba cuatro grandes tribunas, pero como el dinero del préstamo no alcanzó, se levantaron en principio solamente tres, quedando el estadio con una curiosa forma ‘de herradura’, y que muchos creyeron que fue hecho a propósito para que tuviese una vista al Río de la Plata.
Esa tribuna faltante recién se comenzó a construir en 1958 cuando se concretó la venta de Enrique Omar Sívori a Italia, y se finalizó para el Mundial 1978.
Las cuatro tribunas tuvieron nombres diferentes a los actuales a excepción de la ‘Centenario’, llamada así por el antiguo nombre de la avenida Figueroa Alcorta. La ‘Belgrano’ se denominaba ‘Río de la Plata’ porque la avenida Udaondo se denominaba así; en tanto que la ‘San Martín’ era la ‘Oficial’, donde se ubicaban personalidades, autoridades y socios. Por su parte, la hoy ‘Sívori se llamaba ‘Colonia’.