En el año 2006 Gustavo Bellido terminó de purgar una condena por haber asesinado en Rawson a una adolescente de 14 años de edad. Ahora está preso nuevamente por el delito de violencia de género habida cuenta de sus antecedentes por este delito y además porque los jueces y los fiscales temen lo peor, en su escalada de violencia contra su esposa que incluye además lesiones leves a un bebe de ambos, de solo tres meses.
El domingo pasado fue detenido por la policía de Rawson por violar nuevamente una restricción de acercamiento que había dispuesto el juez de familia Martín Alessi. “La denunciante está en serio riesgo de sufrir un femicidio”, había manifestado Alessi en su informe. Ese día Bellido llegó a la casa en la que vivía junto a su mujer, un bebé de ambos de solo 3 meses y un hijo de la mujer producto de otra relación. En el lugar amenazó a la víctima, la golpeó en la cabeza y otras partes del cuerpo y en la refriega, también golpeó al pequeño bebé. La mujer logró fugar y refugiarse en la casa de su hermana, en Playa Unión. La policía inmediatamente detuvo a Bellido.
En la audiencia de control de detenidos el fiscal general Osvaldo Heiber expuso los profusos antecedentes de Bellido, que incluye un homicidio que, por el paso del tiempo desde el cumplimiento de la condena, no pudo ser tenido en cuenta, desde el punto de vista legal, como antecedente para ser tenido en cuenta en la situación actual. Heiber igualmente se refirió al homicidio de la adolescente de 14 años, ocurrido en el Area 12 de Rawson, hecho por el cual Bellido fue hallado culpable.
Violencia contra las mujeres
Sin embargo igualmente dio cuenta de los antecedentes del imputado y para ello se basó en la información que cuenta en el sistema “Coirón”, el sistema informático del Ministerio Público Fiscal del Chubut. Se refirió puntualmente a los reiterados hechos de violencia de género con otras parejas, casos en los que se encuentra imputado Bellido con causas abiertas y otras que la Fiscalía archivó.
“El hecho cometido el domingo es grave por lo reiterado. No fue un hecho aislado. El imputado en los últimos años ha cometido varios hechos similares con parámetros comunes: varias víctimas mujeres, violencia contra ellas, amenazas para que levanten las denuncias y permanente desobediencia a los requerimientos de la Justicia”, indicó. Se refirió con detalles a lo ocurrido en enero del año 2015 cuando golpeó a otra mujer que luego retiró la denuncia, por lo que a la Justicia no le quedó otra posibilidad que dictarle el sobreseimiento. Luego en mayo del 2016 prendió fuego la casilla con una mujer en su interior. La mujer logró huir de las llamas y el fuego fue sofocado. La misma mujer luego pidió el sobreseimiento de Bellido ante la Fiscalía. Posteriormente en octubre de ese mismo año, otra mujer a la que también golpeó fue a la Fiscalía a levantar la denuncia porque “las peleas habían terminado y la relación se había restablecido”.
Investigación abierta
La actual pareja del imputado ya lo había denunciado en enero de este año. Esta causa judicial está abierta. Bellido fue a una casa donde se hallaba la mujer, rompió una puerta, amenazó al dueño de la casa, apedreo un auto, golpeo a otra mujer, amenazó matar con un cuchillo filetero al hijo que su mujer tuvo con otro hombre, a la mujer la golpeó, la arrastró de los pelos y la llevó a su casa donde la retuvo de manera ilegal. Después de cortarle las piernas con un cuchillo, la amenazó para que no realice la denuncia.
A Bellido le imputan varios delitos: lesiones leves doblemente agravadas por violencia de género y desobediencia. Heiber planteo además la posibilidad de “entorpecimiento de la investigación” si Bellido seguía en libertad. Se basó en las permanentes amenazas a sus víctimas para que levanten las denuncias en su contra y en la gravedad de la pena, de ser hallado culpable. “Los amedrentamientos ya han sucedido. La denunciante se encuentra en riesgo de sufrir un femicidio y no queremos lamentar un hecho más grave”, argumentó Heiber ante el juez de garantías Fabio Monti.
Tobillera monitoreada
El defensor de Bellido, el abogado Pablo Sánchez, argumentó que el antecedente de homicidio no deber ser tenido en cuenta en la resolución del Juez, que Bellido debe seguir en libertad porque con su trabajo ayuda a la mantención de su hijo y que en tal caso, la colocación de una tobillera magnética, reemplazaría la posibilidad de la prisión preventiva.
Montí decidió la prisión preventiva por el plazo de tres meses a la vez que le pidió a la Fiscalía de Rawson que unifique las causas en contra de Bellido para que en ese plazo presente la acusación. Tuvo en cuenta la gran cantidad de hechos denunciados en contra del imputado, sus permanentes incumplimientos, la gravedad de los hechos en los que se encuentra involucrado, que la pena en su contra puede ser de efectivo cumplimento y que existe la posibilidad que, de permanecer en libertad, viole la prohibición de acercamiento dispuesta por Alessi.