La secretaria de Producción y Medio Ambiente de Rawson, Ana Amato, respaldó la medida del gobierno provincial de intimar a la empresa Pennisi, Bonaccorso y Malvica S.R.L a que retiren en un plazo de 61 días el barco Sagrado Corazón que se encuentra hundido en la zona de El Elsa desde agosto de 2016.
“Nos alegra que Provincia nos acompañe en la gestión de extracción del barco. Nosotros estamos hace dos años gestionando, y hace un mes volvimos a intimar a Prefectura Naval, mediante una carta documento que envió la intendenta Rossana Artero”, expresó Amato.
El barco Sagrado Corazón se hundió en agosto de 2016, en la zona de El Elsa, frente al puente que une Playa Unión con Magagna. Desde entonces, la Municipalidad gestiona la remoción de la embarcación ante las autoridades de Prefectura Naval Argentina y el Gobierno provincial.
El miércoles pasado la Secretaría de Pesca provincial se sumó a los reclamos municipales e intimó a la empresa propietaria para que efectúe la remoción.
“Me sorprende los tiempos que se toma la provincia para hacer las intimaciones. Se podría haber minimizado el impacto ambiental que vamos a tener. Lo que resta, que es el dragado, es muy oneroso, y hay que ver quién va a asumirlo”, consideró la Secretaria de Medio Ambiente y Producción.
“Estamos muy preocupados, y también con algún grado de enojo, por la demora que transitaron Provincia y Nación en la resolución del hundimiento del Sagrado Corazón. Se cumplen en estos días dos años del hundimiento. Entonces, no es noticia que Provincia recién ahora intime a la empresa”, expresó.
Reunión con Prefectura
Según la funcionaria, Prefectura Naval es la responsable de retirar la embarcación. “Tuvimos reuniones con Mariana Vega, subsecretaria de Ambiente de Chubut, porque estamos dirigiendo la intimación a Prefectura Naval, que es la autoridad que establece la legislación. Porque al dejar abandonado un barco que tiene un permiso pesquero nacional, se entiende que la jurisdicción es Federal”, aseguró.
Amato adelantó que “el próximo lunes vamos a reunirnos con el prefecto Córdoba de Prefectura Naval Argentina, quien nos desarrollará el plan aprobado que tiene para realizar la remoción del barco”.
“Es lamentable el tiempo que transcurrió, sin tener repuesta. La permanencia del buque en las aguas del río afecta el cauce, la calidad de agua. Ayer nos dedicamos a extraer muestras para analizar. Estamos previendo que puede haber un grado de contaminación alto”, consideró Amato.