Autoridades federales de Estados Unidos autorizaron a la empresa espacial SpaceX a poner en órbita terrestre una constelación de 11.943 satélites con el fin de ampliar el alcance de la conexión internet de alta velocidad en la próxima década.
La constelación de SpaceX multiplicaría por varias veces el número de satélites que giran actualmente alrededor de la Tierra, sin contar los proyectos rivales de otras compañías, entre ellas OneWeb, con 900 satélites previstos.
Desde el lanzamiento del Sputnik en 1957, un poco más de 8.000 objetos han sido lanzados al espacio, de los cuales están aún en órbita más de 4.800, según la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Exterior. Pero según el registro del Ejército estadounidense, menos de 2.000 estarían todavía activos.
La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) anunció que había autorizado el lanzamiento de 7.518 satélites por SpaceX, que se suma a otros 4.425 objetos ya aprobados a la misma compañía en marzo por esa agencia.
Ninguno de esos satélites ha sido lanzado. SpaceX tiene seis años para poner la mitad en órbita, y nueve para el total, según las reglas de la FCC.
SpaceX quiere operar la mayoría de esta constelación en una órbita muy baja: entre 335 y 356 km de altura, lo que permitiría un tiempo de comunicación muy corto entre los satélites y el usuario de internet en la Tierra.
En un tuit en mayo, Elon Musk, el dueño de SpaceX, dijo que ese tiempo era de 25 milisegundos para dos satélites de prueba lanzados en febrero, lo suficiente para dos juegos de video rápidos, según él.
Pero esa baja altura es difícil de mantener y los pequeños satélites tienen generalmente una vida corta, de unos años.
La FCC también autorizó a otras empresas a lanzar varios centenares de satélites: Kepler (140 satélites), Telesat (117 satélites) y LeoSat (78 satélites).
Ambito