La silla anterior se había roto y Gastón y Felisa colocaron una mesa y una pizarra en el barrio Pueyrredón para recaudar fondos para comprar otra. Finalmente, se las brindó Desarrollo Humano.
Felisa y Gastón se instalaron días atrás en la plaza “Manuel Carlo” del barrio Pueyrredón con una mesa y una pizarra y empezaron a vender pan dulce y budines para poder cambiar la silla de ruedas del joven ya que tenía las ruedas rotas. Este jueves por la tarde, Gastón contó que Desarrollo Humano le donó otra silla.
La historia de Felisa y Gastón se conoció por Radio Del Mar el miércoles. Ambos estaban instalados en la esquina de Juan Díaz de Solís y Francisco de Asís, a metros de la Escuela 711, en donde vendían pan dulce y budines para poder cambiar la silla que necesita el joven.
“Ya tengo la silla en mis manos, gracias. Me la dio Desarrollo Humano y Familia”, relató Gastón este jueves por la tarde en diálogo con la radio.
ADN Sur