Mientras el Gobierno nacional lanzó un paquete de 60 productos con lo que se ha dado en llamar “Precios Esenciales”, que fija cortes de carne –vacío y matambre- que mantendrán un costo por kilo de $ 149 para el consumidor, hay muchas preguntas acerca de cómo se podría llegar a aplicar ese precio en la zona patagónica, para algunos imposible teniendo en cuenta los costos de producción.
Herman Torres, dueño de una de las carnicerías más conocidas en Esquel, sostuvo que aún no se ha avanzado en este sentido del precio congelado para la carne. Adelantó que informalmente dialogó con el ministro de la Producción de la Provincia, Hernán Alonso, y le transmitió la necesidad de reunirse en algún momento para analizar el tema, y procurar un acuerdo de precios con los comerciantes interesados en participar, ya que es voluntario.
Recalcó que “de lo que propone el Gobierno nacional con el Mercado Central de Buenos Aires, estamos muy lejos. Pero se puede trabajar en un esquema para ofrecer carne a un menor costo al consumidor, porque queremos vender”. Para Torres, tendría que concretarse una reunión entre frigoríficos, productores, carnicerías de la zona y el Ministerio de la Producción, para tratar de encontrar un acuerdo de precios.
El comerciante explicó que sería imposible aplicar un precio de $ 149, cuando el costo del servicio de faena en un frigorífico de la zona asciende a $ 195 por kilo. “Por eso hay que buscar un precio beneficioso en góndola”.
En el caso de su carnicería, ubicada en el centro de la ciudad, Herman Torres puntualizó que está vendiendo entre un 40 y 50% menos sobre la comercialización histórica, y los costos de funcionamiento y de cargas patronales son altos. “Pero –subrayó- la solución es recuperar las ventas que tuvimos en su momento”.
Advirtió que la actividad comercial ha entrado en una etapa muy difícil, y lamentablemente el achique siempre comienza por las fuentes de trabajo.
Diario Jornada