La hasta ayer titular de la cartera educativa, Graciela Cigudosa, decidió presentarse ayer en Fiscalía, en compañía de su mano derecha en el Ministerio, Raúl Care.
La finalidad de la visita espontánea fue la de declarar ante el fiscal Omar Rodríguez, que investiga las reparaciones, refacciones y contrataciones en los establecimientos educativos de la provincia del Chubut.
Cigudosa y Care no tuvieron éxito, debido a que les advirtieron que al ser figura principal de la investigación, el Ministerio Público Fiscal no la considera «una testigo».
El fiscal Rodríguez no recibió a Cigudosa, porque fue advertida antes de que la investigación la tenía en el centro de la escena.
«No la podemos tomar como testigo porque está siendo investigada», reconoció Rodríguez a diario EL CHUBUT, dejando en claro que la ministra es una de las sospechadas en la causa que busca determinar si hubo contrataciones dirigidas, sobreprecios y pagos efectuados por trabajos no terminados, y en otros casos, que no fueron realizados.
Se vindicaron
Como consecuencia del rechazo de la Justicia, la todavía ministra de Educación y el subsecretario presentaron un escrito en Fiscalía vindicándose.
La figura de la vindicación está establecida en la Constitución de la Provincia del Chubut.
El artículo 68 de la Carta Magna provincial describe que «todo empleado o funcionario público a quien se le imputan delitos en el ejercicio de sus funciones o faltas que afectan su actuación pública, está obligado a acusar para vindicarse».
Agrega que tal acción «deber ser ejercitada dentro de un plazo máximo de treinta días contados desde la toma de conocimiento de la imputación, constituyendo su omisión falta grave a los efectos pertinentes. A los fines del ejercicio de la acción goza del beneficio del proceso gratuito».
En forma gráfica, la vindicación funciona como una «autodenuncia» en la cual el funcionario se presenta en la Justicia solicitando que lo investiguen.
El Chubut