El fiscal general de Comodoro Rivadavia, Héctor Iturrioz, admitió que todos los elementos que surgen de la investigación por la muerte de Pedro Cárdenas, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida en el interior de su propio vehículos el martes de esta semana, apuntan a un suicidio.
El cuerpo de Cárdenas apareció con una herida mortal de arma blanca en el pecho y se pensó en un suicidio por los dichos de su ex pareja, quien dio aviso a su tía y esta a la policía ante la amenaza de que la mataría a ella o se suicidaría, tras una discusión.
En un principio se dispuso la detención de la mujer, identificada como Daiana Gisel Pérez, de quien se sospechó porque no es muy habitual un suicidio con la modalidad de «harakiri» como sería el caso de Cárdenas que fue encontrado en su propio vehículo estacionado sobre una calle del barrio La Floresta de Comodoro Rivadavia.
El fiscal Iturrioz reconoció que «en la zona no hay muchos antecedentes pero mirando varios casos no es tan raro los casos de este tipo, es decir el suicidio por lesión de cuchillo», por lo que se abona la hipótesis de la autolesión a punto tal que se dispuso de inmediato la excarcelación de la mujer.
Se tuvo en cuenta la diferencia física entre uno y otro, y se deduce que la femenina de ninguna manera podría reducir y lesionar a una persona mucho más corpulenta, que hacía deportes de contacto sin ofrecer resistencia.
Además el arma encontrada en el vehículo es compatible con la lesión mortal que fue provocada con precisión sobre el pecho.