Hace 17 años una mujer se la había llevado de un hospital en Ciudad del Cabo. Ahora se supo la verdad gracias a la autofoto.
Miché Soloman se hizo amiga en 2015 de una chica que había entrado a su colegio. ¿Lo llamativo? Todos sus compañeros les decían que se parecían mucho, aunque Cassidy era tres años menor.
Las adolescentes se hicieron buenas amigas. Y como la mayoría de los chicos, se sacaron una selfie. Otra vez, el parecido era innegable. Tanto, que muchos le preguntaron a Miché si no era adoptada. Su mamá, Lavona Soloman, lo negó.
Los papás de la adolescente más chica, Cassidy, no dijeron lo mismo: le preguntaron a Miché si había nacido el 30 de abril de 1997 y ella respondió que sí.
La joven de 17 años fue una semana más tarde a la oficina del director. Ahí la esperaban dos asistentes sociales que le contaron una historia. Su historia. Una bebé llamada Zephany Nurse había sido robada del Hospital Groote Schurr, en Ciudad del Cabo, en 1997.
Miché no creyó lo que le decían, pero un examen de ADN lo confirmó: era la bebé secuestrada. “Me senté allí en estado de shock. Mi vida estaba fuera de control“, reconoció la joven al conocer los resultados.
La policía arrestó a Lavona Soloman, la mujer que durante 17 años le dijo que era su madre. La hipótesis de los investigadores es que ella sufrió un aborto espontáneo pero lo ocultó. Fingió seguir embarazada y cuando encontró la oportunidad robó a un bebé. Y le dijo a sus familiares que la había tenido en su casa, sola.
Por el robo de Miché, Lavona fue juzgada y declarada culpable. Cumple una pena de 10 años de prisión.
“Zephany es la verdad y Miché, la niña de 17 años que era, era una mentira. Así logré equilibrar ambos nombres. Pueden llamarme Zephany o Miché, está bien“, concluyó la joven en una declaración a The Sun