Oliverio Huaiquin en diciembre cumplirá 92 años y este jueves a la madrugada fue víctima de un violento asalto en su casa de barrio La Floresta. El abuelo dialogó con ADNSUR y contó el calvario que le tocó vivir. “Es la primera vez que me roban en la edad que tengo. En 91 años nunca me pasó nada”, lamentó.
Oliverio Huaiquin tiene 91 años y esta madrugada fue asaltado en su casa del barrio Las Floresta, el lugar donde siempre vivió. Cree que era cerca de la medianoche cuando un sujeto entró a su habitación mientras leía la biblia.Cuenta que al principio no entendía que pasaba y luego comenzó la pesadilla.
Oliverio este jueves dialogó con ADNSURy contó cómo fue el asalto que sufrió en su casa de 12 Octubre al 3200.
“Para mí era temprano. Cené ycomo soy evangélico estaba leyendo la biblia sentado en mi casa. De repente entra una persona…lo quede mirando. ‘¿Y está persona?’” – se preguntó – “Y me dice‘vengo a pedirle unos pesitos’. Yo le dije no tengo plata y ahí empezó todo”.
Oliverio cuenta que comenzó a forcejear con el ladrón y en ese instante entró un cómplice a la habitación. “El otro era más grandote, me tapaban la boca para que no grite.Yo grite pero me taparon fuerte, así”, dice haciendo un ademan.
El hombre cree que eran entre las 12 y la 1 de la madrugada. Admite que los ladrones no le pegaron. Sin embargo, en el forcejeo se terminó lastimando una mano.
Cuando quedó tirado en el piso, Oliverio le pidió a Dios que le de fuerza.Mientras tanto, uno de los ladrones lo sujetaba, y el otro buscaba dinero en la casa.
Finalmente, los asaltantes encontraron algunos “pesitos” que Oliverio tenía arriba de un ropero para comprar remedios y comida. Una vez que lograron su cometido, borraron sus huellas con una campera, huyeron y lo dejaron tirado.
Los ladrones revolvieron todo hasta que encontraron unos «pesitos» que el hombre guardaba para remedios.
LA PRIMERA VEZ EN 91 AÑOS
El jubilado, quien emigró a Argentina a los 16 años, como pudo se levantó y pidió ayuda a sus vecinos que viven en el mismo predio que el habita. Ellos fueron quienes llamaron a la policía.
Al lugar también llegó una ambulancia que lo asistió. Es que producto del shock sufrió un pico de presión.
Patricia, quien vive en la casa del frente del terreno donde habita el hombre, no ocultó su sorpresa por lo ocurrido.Asegura que la zona es tranquila y que a Oliverio todo el barrio lo conoce, incluso los chicos suelen ayudarlos con las bolsas cuando lo ven llegar.
El abuelo tampoco encontró explicación. “Es la primera vez que me roban en la edad que tengo. En 91 años nunca me pasó nada, nunca he sido atropellado por nadie porque siempre me cuide, nunca anduve en la farra ni me metía con cualquiera”, lamentó.
Este mediodía, Oliverio era contenido por sus amigos de la Iglesia Pentecostal a donde asiste todas las semanas. Ellos buscaban respuestas y se hacían una sola pregunta. ¿Quién puede ser tan cobarde de atacar de esa forma a un hombre de 91 años?
Oliverio contó el calvario que le tocó vivir: «Es la primera vez que me roban en la edad que tengo», informó ADN SUR.