La noche anterior, el joven británico había eliminado un nido de arañas en su casa.
Tras ausentarse por un día de su trabajo porque se sentía enfermo, un joven del condado de Kent (Reino Unido) descubrió que la fuente de su mal era una araña que se había metido en su canal auditivo.
El hecho le sucedió el pasado 9 de octubre al diseñador gráfico Liam Gomez, de 27 años, quien contó la historia en su página de Facebook. Según lo detalla, se despertó con sensación de oídos tapados y vértigo, por lo que avisó que no asistiría a trabajar. Para tratar la molestia se echó orejas adentro unas gotas de aceite de oliva, con lo que volvió a descansar.
Acostado, sintió un cosquilleo, pero lo atribuyó al remedio casero. Se despertó un par de horas después con la misma sensación, pero esta vez podía escuchar un ligero sonido, por lo que decidió averiguar con un bastoncillo de algodón y una horquilla de cabello.
«El bastoncillo salió relativamente limpio… excepto porque había allí una pata», escribió. Cuando entendió que se trataba de una araña alojada en su oído, Gomez, horrorizado, se dispuso a sacarla por completo.
En declaraciones a medios locales, el joven explicó que la noche anterior había acabado con un nido de arañas que encontró en la entrada de su casa. Además, aseguró que en lo sucesivo dormirá con orejeras para evitar que se repita la situación, informó Actualidad RT.