Desde que se cruzaron en el casamiento de Pampita y no se saludaron, mucho se habla de la relación entre Valeria Mazza y Pancho Dotto. O mejor dicho, de la ausencia de relación.
¿Qué pasa entre ellos? La modelo visitó a Moria Casán en Incorrectas, por América, y contó todo. «Cuando trabajé en Argentina, Pancho era mi agencia pero ya en el 92 viajé a los Estados Unidos y viví 15 años entre ese país y Europa. Y Pancho nunca fue a verme. Ni una vez. Yo tenía agencias en otros países y cuando venía a Buenos Aires él me conseguía algunos contratos. Vino a mi casamiento, conoció a mis hijos y seguimos teniendo relación. No sé por qué salió a decir estas cosas públicamente. Nunca me dijo nada. No me quedé con nada que no me corresponde y si es así que lo reclame donde se debe. Muchas modelos nos alejamos de él, quizá porque no supo crecer. Tiene buen ojo clínico para saber quién puede llegar y quién no, pero una tiene otras necesidades. En algún punto termino pensando que hay un tema sentimental. Y es una persona que quiero mucho y me duele verlo hablando mal de mí en los medios. Me da pena, pero creo que reclama algo sentimental», detalló la modelo.
Valeria también se refirió a su eterna rivalidad con Claudia Schiffer. «Hoy no seguimos en contacto pero si nos vemos hay buena onda y comentamos sobre familia e hijos. Es verdad que nos compararon en una época. Hicimos una campaña en los Estados Unidos y ella me saludó bien y después habló con todo el mundo para que me saquen de ahí. Hicimos dos fotos juntas, que son unas que están en las redes, jugando al pool, y me dieron un ramo de flores y me fui. Me parecía increíble que ella se preocupara porque yo estaba en la campaña. Para mí la competencia es con uno mismo; la autosuperación, y jamás mirar para el costado. Después de la conducción que hice en el Festival de San Remo, en Italia, los diseñadores trataban de juntarnos en los finales de los desfiles porque la gente y la prensa hablaban».
Es una persona que quiero mucho y me duele verlo hablando mal de mí en los medios. Me da pena, pero creo que reclama algo sentimental
Además, recordó el día en que conoció a Leonardo Di Caprio. «Se estrenaba Titanicy coincidimos en una cena de un productor de cine amigo, en Los Ángeles. Di Caprio era un nenito lindo pero todavía no era muy conocido y no le dimos bolilla. Al otro día vi la película y me enamoré. Quería que hicieran otra comida para volver a verlo».
Finalmente, Mazza contó que viaja con su marido Alejandro Gravier y con sus hijos a Francia, para pasar las fiestas con su hijo Tiziano. «Está allá entrenando porque va a participar en los Juegos Olímpicos de la Juventud representado a la Argentina, en ski alpino. Me emociona porque hace años que este es su sueño», dijo orgullosa Valeria, informó La Nación.