Para sorpresa de propios y extraños, el Gobierno nacional publicó en el Boletín Oficial de este martes –divulgado poco después de la medianoche del lunes- un decreto mediante el cual se le otorga a la Provincia del Chubut un “anticipo financiero” de $ 1.000 millones para “atender financieramente los compromisos más urgentes derivados de la ejecución de su presupuesto de gastos y amortización de deudas”, reza el decreto firmado por el presidente Alberto Fernández; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y el ministro de Economía, Martín Guzmán.
El decreto fue el resultado de una reunión llevada a cabo en el Ministerio de Economía este lunes por la tarde, que sentó en la mesa al ministro Guzmán y al secretario de Hacienda de la Nación, Raúl Rigo, con el gobernador Mariano Arcioni y su ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Antonena.
Sin embargo, en medio de mucho hermetismo y de ni siquiera divulgar una foto de la reunión, el Gobierno del Chubut emitió este lunes por la noche un comunicado en el que no se mencionaba ningún tipo de ayuda y sólo algunas frases de Arcioni: “Presentamos la situación de la Provincia y las medidas a tomar durante el año. Se hizo un repaso del presupuesto aprobado en la Legislatura y el peso específico que tiene la masa salarial sobre el mismo. Además, le hemos presentado el plan de reperfilamiento de deuda”, expresó el mandatario en el comunicado oficial.
“Le hemos solicitado a Guzmán trabajar en forma conjunta, en el marco de las dificultades que tenemos en la provincia, que no escapan del contexto nacional, y de esa forma poder encontrar soluciones a los efectos de cumplir con las obligaciones del Estado”, concluía el escueto parte oficial.
O Arcioni y Antonena no fueron informados de los términos del decreto que se iba a firmar o, como analizan algunos, consideraron la ayuda insuficiente en relación a las necesidades financieras que tiene la Provincia en el corto plazo.
Es más, no sólo los medios chubutenses se hicieron eco del casi nulo resultado anunciado por el Gobierno provincial en su comunicado. También diarios nacionales como Ámbito y El Cronista publicaron tras la reunión de Guzmán y Arcioni análisis negativos para la posición de Chubut. Inclusive, filtrando datos sobre un presunto enojo de la Casa Rosada con el chubutense por no haber ajustado lo suficiente los números y pretender aumentarse de manera desmedida los salarios de la planta política.
Gesto sí, salvataje no
La ayuda, sin embargo, no deja de ser un gesto político de la Casa Rosada. Pero de ninguna manera puede ser considerada como un “salvataje”. No, al menos, del nivel de fondos que la Provincia está demandando para poder salir de la grave crisis que tiene.
Estos $ 1.000 millones, por caso, apenas ayudarán al Gobierno provincial a terminar de pagar los aguinaldos (necesitaba unos $ 1.300 millones y en las arcas quedaban alrededor de $ 500 millones de un adelanto anterior), pero ahora el gobernador Arcioni y su ministro de Economía deben juntar otros casi $ 4.000 millones de acá a finales de enero para poder pagar los cuatro rangos salariales de la Administración Pública.
El decreto presidencial (N° 23/2020) dice en sus considerandos que “el Gobierno de la Provincia del Chubut se ve impedido, en forma transitoria, de atender financieramente los compromisos más urgentes derivados de la ejecución de su presupuesto de gastos y amortización de deudas”. Y que en función de ello, “resulta necesario procurar soluciones inmediatas a las dificultades financieras transitorias por las que atraviesa la citada Provincia”.
El adelanto a Chubut incluye en el decreto los términos y condiciones de devolución: deja en claro que es “a cuenta de las respectivas participaciones en el producido de los impuestos nacionales sujetos a distribución o de los montos previstos en el Compromiso Federal”; y que “dichos anticipos deberán ser reintegrados dentro del mes de su otorgamiento, mediante retenciones sobre el producido de los mismos impuestos coparticipados”.
También se aclara que el Gobierno nacional “podrá ampliar dicho plazo de devolución, sin exceder el Ejercicio Fiscal en que se otorgue.
Y que, asimismo, “la norma en trato dispone que los montos anticipados devengarán intereses sobre saldos, desde la fecha de su desembolso hasta la de su efectiva devolución, de acuerdo con la tasa y el mecanismo que allí se establece”.
Además, el Gobierno de Chubut deberá: a) Afectar su participación en el Régimen Transitorio de Distribución de Recursos Fiscales entre la Nación y las Provincias establecido por la Ley Nº23.548 y sus modificaciones o el régimen que lo sustituya, y en otros recursos coparticipables, sin afectación a un destino específico por hasta el monto anticipado con más sus intereses; b) Autorizar a la Secretaría de Hacienda dependiente del Ministerio de Economía a retener automáticamente los fondos emergentes de la Ley Nº23.548 y sus modificaciones o el régimen que la sustituya, y de otros recursos coparticipables sin afectación a un destino específico por hasta el monto anticipado, a fin de cancelar los fondos que se otorgan, más sus intereses.”