Desde el Ministerio de Desarrollo Social, Familia, Mujer y Juventud, se realizó un intenso trabajo durante este domingo en distintas localidades de la provincia, asistiendo a familias que se vieron afectadas por el temporal de fuertes ráfagas.
Se acompañó desde la delegación de la ciudad de Esquel y a través de los funcionarios de la Subsecretaría de Desarrollo Social, encabezados por el coordinador, Martín Sandoval, a familias afectadas de esa ciudad y de Trevelin. Los más afectados, sufrieron la voladura de techos de viviendas particulares, por lo que se articuló también con la Secretaría de Desarrollo Social del municipio de Esquel, para brindar acompañamiento.
El temporal generó importantes daños, debido a la caída de árboles y postes de alumbrado, además de la voladura de carteles y algunos techos en distintos puntos del valle, como Gaiman, Rawson y Trelew. Con estas últimas, se articuló hasta última hora del domingo la entrega de materiales y asistencias a las familias afectadas, en un trabajo articulado con los Municipios locales.
Mientras que en la localidad de Gaiman, el subsecretario de Políticas Sociales, Claudio Mosqueira, realizó la entrega de elementos de construcción, junto a personal del Centro Arturo Roberts.
Por su parte, la ciudad de Madryn, además del temporal, sufre las consecuencias de un terrible incendio en la zona de El Doradillo, en donde más de diez familias, perdieron sus viviendas en manos del fuego. Allí se acompañó en una primera instancia, desde la cartera provincial.
La ministra Cecilia Torres Otarola, se encontraba junto a parte de su equipo de trabajo relevando necesidades de los vecinos afectados en zona de la meseta chubutense, acompañando a las familias de Bajada del Diablo, el Escorial, y Gastre.
Además, a través de la Subsecretaría de Desarrollo Social, Jaqueline Rodera, gestiona en la Ciudad de Buenos Aires, ayuda de Nación, a través del Comité de Asistencia crítica que interviene en estos casos, siendo menester para el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia estar presentes junto a cada damnificado, a lo largo de todo el territorio chubutense, en la medida de las posibilidades, inclusive en tiempos económicos adversos.