El retroceso generó pánico en los mercados. El Brent -referencia en Argentina- perdió u$s10,91, o un 24,1%, a u$s34,36. El WTI cedió u$s10,15, o 24,6%, a u$s31,13. Son los precios más bajos desde febrero del 2016.
Los precios del petróleo sufrieron el lunes su mayor derrumbe diario desde la Guerra del Golfo en 1991, tras el colapso de un pacto de recorte de suministros entre la OPEP y Rusia, lo que amenaza con inundar los mercados de energía con suministros tras los dañinos efectos en la demanda de la epidemia de coronavirus.
Tras la imposibilidad de un nuevo acuerdo en torno a los recortes de suministros, Arabia Saudita y Rusia anunciaron el fin de semana que elevarían su producción de crudo, lo que podría inundar rápidamente los mercados petroleros en momentos de una demanda global ya deprimida.
La baja de casi un 25% en el crudo generó pánico en los mercados, haciendo que los tres principales índices de Wall Street sufrieran su mayor baja porcentual diaria en más de una década . Esta situación se suma al extendido temor a que el coronavirus lleve a la economía mundial a una recesión.
Los futuros del crudo Brent perdieron 10,91 dólares, o un 24,15%, a 34,36 dólares el barril, después de haber bajado previamente en hasta 31%, a 31,02 dólares, su menor nivel desde el 12 de febrero del 2016.
En tanto, los futuros del petróleo WTI de Estados Unidos cedieron 10,15 dólares, o un 24,6%, a 31,13 dólares el barril. Previamente en el día, el contrato perdió un 33%, a 27,34 dólares, también un piso desde febrero del 2016.
Estas pérdidas suponen el mayor descenso porcentual diario para ambos referenciales desde el 17 de enero de 1991, en plena Guerra del Golfo Pérsico, cuando los precios cayeron cerca de 33%.
El pacto de tres años entre la OPEP -que incluye a su líder de facto Arabia Saudita- y naciones aliadas lideradas por Rusia se vino abajo el viernes, luego de que Moscú se rehusó a apoyar recortes más drásticos de los suministros para lidiar con los efectos económicos del brote de coronavirus.
La OPEP respondió removiendo todas las restricciones a su producción, lo que desató temores a un sobre abastecimiento del mercado, ya sumergido en un exceso de oferta de crudo.
A pesar de la caída de la demanda de energía por el coronavirus, Arabia Saudita planea subir su producción por sobre los 10 millones de barriles por día (BPD) en abril, después de que expire el actual acuerdo de recortes de suministros, dijeron el domingo dos fuentes a Reuters.
El reino -que ha estado bombeando cerca de 9,7 millones de BPD en los últimos meses- también rebajará el precio de venta de su petróleo.
Rusia -uno de los mayores productores mundiales de crudo junto a Arabia Saudita- y Estados Unidos también dijeron que podrían incrementar su producción y que podían confrontar unos precios del petróleo bajos por entre seis y 10 años.