En las últimas 24 horas se han detectado seis nuevos casos de coronavirus en Rusia, cuatro en Moscú, uno en Kaliningrado, la antigua Prusia Oriental, y otro en la región sureña de Krasnodar, según datos oficiales. Tres de estas personas hospitalizadas en la capital rusa se infectaron en Italia. El número total de personas que enfermaron de COVID-19 en toda Rusia se eleva ya a 34, de los que 31 son ciudadanos rusos, dos chinos y un italiano. Los dos chinos y uno de los rusos se consiguieron recuperar y fueron dados de alta. No ha habido por ahora ningún fallecimiento debido al virus.
La frontera rusa está completamente cerrada para ciudadanos de China, Corea del Sur, Irán e Italia, a quienes ya no se emiten visados. Españoles, franceses y alemanes sí pueden continuar viajando a Rusia, pero bajo la obligación de observar una cuarentena domiciliaria de 14 días nada más llegar al país.
Aeroflot, la principal compañía aérea rusa, ha cancelado parte de sus vuelos a España, en particular a Alicante, Málaga, Palma de Mallorca, Tenerife y Valencia, y restringido los que tienen ciudades francesas y alemanas como destino. A Italia se mantienen por el momento únicamente los vuelos a Roma. El alcalde de Moscú ha prohibido además la celebración de todo tipo de eventos (deportivos, de ocio, culturales y sociales) que reúnan a más de 5.000 participantes. Mientras, continúan los controles sanitarios en escuelas y en los transportes.