Se promueve a los fines de desacelerar la propagación de la enfermedad, ya que previene que los pacientes asintomáticos que estén circulando no esparzan el virus, sobre todo en lugares donde el distanciamiento social sea difícil de cumplir, como en farmacias, bancos, supermercados, entre otros. Sin embargo, los especialistas advierten que las medidas de limpieza e higiene personal son las que deben prevalecer.
Desde la Municipalidad, a través de la Secretaría de Salud, y en conjunto con el Ministerio de Salud de la Provincia, recomienda -sin obligación por el momento- el uso de tapabocas caseros para concurrir a lugares con mucha circulación de personas como farmacias, bancos, supermercados, entre otros.
El objetivo es también evitar el uso de barbijos quirúrgicos y N95 que deben quedar disponibles para el personal de salud, pacientes enfermos y aquellos que cuidan de ellos.
El secretario de Salud municipal, Carlos Catalá, resaltó que “el uso de este tipo de máscaras no dejan de lado las medidas higiénicas, como lavarnos las manos y toser en el pliegue del codo, como así también mantener el distanciamiento social de 1,5 metros. Si respetamos eso, es el principal antídoto que existe hoy”.
Cómo fabricar tapabocas y cómo usarlos
Para fabricar máscaras personales hay que tener en cuenta varias cuestiones: Que ofrezcan una buena respirabilidad; que sean cómodas; que permitan buen ajuste; que cubran nariz, boca y mentón; que tengan varias capas y que sean lavables.
“Teniendo estos recaudos, nos garantizamos que nos toquemos menos veces el barbijo para acomodarlo y por ende, la cara. También que su uso sea grato”, explicó Catalá.
Dentro de las telas que se pueden utilizar están las siguientes: friselina de alto gramaje, (como la de las bolsas de compra); o algodón (como la de fundas de almohadas y remeras). Y entre las capas de tela es necesario colocar alguna servilleta de papel, filtro o nylon. Pero siempre tener en cuenta que sea un material que no dificulte la respiración.
Cuando se deja de usar, hay que lavar el tapabocas con agua caliente y jabón y no dejarlo sin lavar sobre mesadas, mesas y otras superficies, ya que se dispersan los microrganismos. Antes de retirarlo, es necesario tener las manos limpias, y luego hacerlo por las bandas o hilos de sujeción, sin tocar la máscara. Una vez retirada, otra vez hay que lavarse las manos con agua y jabón o algún desinfectante a base de alcohol.