Este jueves sobre las 18 hs. los controles ubicados sobre la Ruta Nacional Nº3, entre el Barrio General Mosconi y la rotonda de la Universidad, se convirtieron en un cuello de botella que se vió sobrepasado por la gran cantidad de autos que intentaban llegar a la zona céntrica de la ciudad.
Los controles de tránsito funcionan en distintos puntos de la ciudad a fin de comprobar que quienes circulan cuentan con la debida autorización para hacerlo, y no están violando la cuarentena.
Sin embargo, la enorme cantidad de vehículos que este jueves por la tarde circulaba desde zona norte hacia el sur dificultó el trabajo de los agentes, que deben verificar la documentación presentada por cada conductor.
Esto, por supuesto, generó demoras en la circulación y molestias en los automovilistas, que no dudaron en comenzae a los bocinazos.