Las automotrices argentinas siguen cumpliendo un papel realmente importante para combatir el coronavirus. En ese contexto, Toyota se prepara para una iniciativa clave.
La empresa japonesa utilizará sus instalaciones en la planta de Zárate para producir nada más ni nada menos que 1.000 respiradores por día.
Cabe destacar que los producidos por Toyota no se tratarán de equipos de alta complejidad sino de soportes respiratorios mecánicos de atención médica de urgencia.
Los respiradores artificiales de alta complejidad deben ser producidos exclusivamente por las empresas especializadas que ya estén habilitadas por la autoridad sanitaria a nivel nacional.
En ese contexto, en Argentina ya hay dos fabricantes radicados en la provincia de Córdoba que se encuentran con su capacidad de producción al máximo.
“Desde Ingeniería de TASA están colaborando con producción de respiradores manuales que, con ayuda de universidades, pueden en unos 10 días producir 1.000 respiradores por día”, señalaron a Ámbito Financiero.
Alianza de industrias
Hasta el momento, la administración de Alberto Fernández logró que compañías importantes de sectores tan diferentes como el automotriz, el bodeguero y el de los biocombustibles acerquen propuestas para ayudar en este momento crítico de la pandemia.
El primer sector que tomó la posta fue el de los productores de bioetanol y los principales ingenios del país que se ofrecieron a destinar parte de sus operaciones para incrementar la partida de alcohol que permita, en parte, resolver ese faltante.
Esto se debe a que el alcohol en gel está compuesto por alcohol etílico medicinal y glicerina que a su vez provienen de la soja y el maíz desde donde surgen precisamente los biocombustibles.
En ese marco, representantes del Centro Azucarero Argentino (CAA), se reunieron la semana pasada con funcionarios del Ministerio de Desarrollo Productivo para analizar variantes que les permitan ayudar en esa crisis.
Los empresarios ofrecieron redireccionar parte de su producción habitual de bioetanol para elaborar alcohol con especificación farmacéutica, insumo base del alcohol en gel.
El objetivo es ayudar a normalizar el abastecimiento del producto para lo cual habría que reducir el corte de bioetanol obligatorio en los combustibles que en la actualidad se encuentra establecido en un 10% para el biodiesel y 12% para el bioetanol.
Por lo pronto, varias empresas de este sector hicieron aportes unilaterales al Gobierno para tratar de paliar la situación como el caso del grupo Ledesma, que donó 2.500 litros de alcohol al Ministerio de Salud de Jujuy, a los fines de producir alcohol en gel ante la emergencia sanitaria y epidemiológica decretada por la gobernación.
También productores de Córdoba, San Luis y Santa Fe donaron 150.000 litros del producto a los respectivos gobiernos provinciales para la fabricación de alcohol en gel.
Otro ejemplo es el de la bodega Chandon, propiedad del grupo francés LVMH, que le ofreció al gobierno de Mendoza destinar parte de sus viñedos de la localidad de Luján de Cuyo producir 1.000 semanales de alcohol en gel.
La compañía busca hacer uso de una resolución del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) que permite utilizar vinos intervenidos, que por deficiencias técnicas no son aptos para el consumo pero que por su alto contenido etílico los vuelve ideales para la producción del tan necesitado alcohol en gel.
En el sector se asegura que existe la posibilidad de realizar una distribución gratuita y benéfica de casi cuatro millones de frascos de alcohol en gel a partir de vinos que surgieron por acidez volátil superior al límite establecido o características muy exageradas de aromas y sabores extraños y desagradables.
De hecho, la empresa ya inició los trámites con el Ministerio de Salud de la provincia para comenzar la producción de este insumo en la bodega con el objetivo de realizar donaciones a los principales centros de salud de la provincia.
En principio, serán 1.000 frascos de 300ml de alcohol en gel además de otros 1.000 litros a granel para que sea fraccionado y para comenzar la producción en bodega con una primer entrega de 1.000 litros semanales.