El viernes, el Gobernador se puso del lado de los empleados públicos que menos ganan. Habló de los policías que cobran 36.000 pesos de bolsillo y los comparó con los que tienen la suerte de cobrar cinco veces más y, sin embargo –según él -, no ponen lo que hay que poner. Lo que se olvidó de mencionar fue lo que se publica en el Boletín Oficial todas las semanas. Allí se observa un festival de designaciones políticas en el Gabinete que se vienen haciendo desde que se comenzó a hablar de “ajustar el gasto”.
“No tengo problema en que me insulten, que digan lo que carajo quieran de mí, pero prefiero pagar tarde los sueldos a dejar a un trabajador en la calle”, dijo para salir al cruce de los que le proponen eliminar 7.000 sueldos públicos para equilibrar el déficit fiscal.
En ese escenario, el Gobernador tiró arriba de la mesa un proyecto para poner topes salariales en el Estado. Algo así como que nadie cobre más de los 243.000 pesos que cobra él. Una idea que han tenido muchos antes pero que a estas alturas parece impracticable para un Gobierno al que no le sobra nada, no sólo en términos económicos.
Hay que leer todas las semanas el Boletín Oficial para asistir al festival de designaciones políticas que se vienen haciendo desde que se comenzó a hablar de “ajustar el gasto”. No hay que echar empleados públicos, hay que eliminar el gasto salarial superfluo. Ser o parecer no es un dilema para esta etapa de crisis casi terminal de Chubut. Hay que ser y parecer.
Un claro ejemplo de esto fueron las designaciones que se produjeron en el último mes. El pasado 2 de Junio el ex secretario General de la Gobernación, Carlos Relly, fue designado -tras la publicación del Decreto N° 428- como subsecretario en el Ministerio de Economía y Crédito Público. De esta forma, continúan las designaciones dentro del Gabinete Provincial.
Acto seguido, el Gobierno de Mariano Arcioni designó Claudio Mosqueira en el cargo de Subsecretario de Agricultura del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Industria y Comercio. En enero de este año Mosqueira, era designado en Políticas Sociales.
En tanto, Masiel Carrasco fue designado en el cargo de Subsecretario de Coordinación y Relaciones Institucionales, de la Secretaría General de Gobierno.
La ex concejal Norma Contreras fue designada como personal de Gabinete, dependiente del Ministerio de Gobierno y Justicia, percibiendo una remuneración equivalente al rango de Director.
Mario Morante y Luis Lefipan, también fueron designados el mismo día que la ex concejal Contreras, como personal en el Ministerio de Seguridad y con un rango de remuneración equivalente al de Director.
Mario Morante y Luis Lefipan, también fueron designados el mismo día que la ex concejal Contreras, como personal en el Ministerio de Seguridad y con un rango de remuneración equivalente al de Director.
Para ajustar niveles salariales al ras sin medir la importancia de cada sector del Estado, se necesitan manos en la Legislatura y consensos en el Poder Judicial, dos lugares en donde el Gobierno tiene menos amigos que Adán –según publica Diario Jornada-.