Pablo Lada, referente de la defensa del agua en Chubut, parte de la Unión de Asambleas de Comunidades y del Movimiento Antinuclear, ponderó el uso de la herramienta democrática de la Iniciativa Popular por parte de los vecinos de la provincia para defender la ley que prohíbe la megaminería. Afirmó que crece la concientización por los recursos naturales y que el “despertar” en Mendoza también influyó. “A diferencia de la otra vez, ahora la gente ya conoce la Iniciativa Popular. Va camino a transformarse en un fenómeno social”, analizó Pablo Lada, en una entrevista con La Namunkurá, y agregó que ya hay más de 40 pueblos y ciudades que se sumaron a la junta de firmas.
-Es una jugada audaz de las Asambleas la Iniciativa Popular ante la parálisis del gobierno en medio de esta crisis. ¿Cómo lo analizás?
-Es cierto el análisis que hacés, está en un momento complejo el gobierno (provincial). Esta idea la traíamos desde hacía un buen tiempo, de volver a llevar adelante la Iniciativa Popular, pendiente para nosotros de tratamiento. Y ahora que mejoró un poquito la cosa (ante el covid-19), con todos los cuidados, empezamos. También vimos algunas señales: la gran minería fue declarada como actividad esencial: nunca paró, como otras actividades dañinas para la salud (en el norte se quejan también que las fumigaciones no pararon). Y además vimos acá particularmente la aparición de nuevos actores como (Eduardo) Elsztain, uno de los empresarios más importantes del país, haciéndose socio con el proyecto Esquel, diciendo que va a trabajar por la licencia social para llevar adelante el proyecto; todas luces de alarma, en una situación tan compleja donde la población está limitada de moverse. Ahí se planteó hacer el lanzamiento, y a una semana- 10 días, estamos viendo que va en camino de transformarse en un fenómeno social: pasaron 10 días y ya hay 40 pueblos o ciudades que han tomado la Iniciativa Popular. Digo han tomado porque la gente llama y dice que quiere participar. Lo que está pasando es fenomenal.
Pablo Lada argumenta que en esta resistencia de asambleas vecinales pesa la relación Chubut- naturaleza, y que la construcción sobre tener conciencia de la importancia del agua se viene forjando desde hace años, desde Esquel en 2003, o más atrás también, con la resistencia al basurero nuclear en Gastre. “Después hay una crisis de representatividad: se queda corta porque se la pasan representando otros intereses y no los de los que los pusieron, por el voto popular, en este lugar. Es un reclamo de todo el mundo los límites de la democracia. También nos tenemos que hacer cargo como ciudadanos, porque no podemos echarle toda la culpa a quienes nos gobiernan: es muy fácil poner el voto y después desentenderse. Necesitamos hacernos cargo de estas herramientas (como la Iniciativa Popular). Cuando hablo con gente de otras provincias les digo que ojalá se copien ese plano, mas allá de la temática extractivista. Tenemos que lograr un grado de participación en la toma de decisiones. Consulta Popular (Esquel), Iniciativa Popular (que las estrenamos las asambleas) y una que no ha sido usada y en esta provincia debería usarse, que es la revocatoria de mandato. Debemos investigar cómo usarlas: sus leyes tienen contradicciones y están hechas para que tratemos de no usarlas. Más allá del resultado, es el proceso que se está dando: iniciativa popular tomada por vecinos sin ningún aparataje partidario, y sin ningún recurso, más que el bolsillo de los vecinos.
De constante presencia en las movilizaciones populares, Lada fue consultado por este cronista sobre qué diría sobre este momento histórico su mentor, Javier Rodríguez Pardo, un activista pro asambleas y pionero defensor de los recursos naturales en Argentina, que también había pensado herramientas populares para dar respuestas. “Qué bueno que lo traigas a la memoria. Javier es una estrella, un norte que siempre nos está iluminando; con una mirada más a largo plazo. A él lo emocionaría ver al pueblo organizado, más allá de la ley (una ley se borra con otra ley…) porque si nosotros no hacemos carne, la ley para quienes gobiernan vale muy poco. El tenía una frase: ‘nuestros No deberán tener la fuerza de imponer decisiones populares’. Lo imagino con una sonrisa, viéndonos unidos como simples vecinos en pos de un objetivo”, imaginó.
Además, en la entrevista Lada analizó el rol de los medios comerciales que ignoran las manifestaciones públicas de vecinos, el lobby minero metido allí, las publinotas de la Cámara de Empresarios Mineros, el papel de Genaro Pérez desde Gastre como empleado de Pan American Silver y el foco en Legislatura. “Ojalá termine con un tratamiento respetuoso a la Iniciativa Popular y enmienden un fraude a la democracia como el de 2014”, cerró.