“La llegada de las facturas con vencimiento en el mes de agosto, generó, de alguna manera, malestar e inquietud en una porción de la comunidad, particularmente en el residencial. En esto queremos poner un poco de claridad y dejar bien asentado que las facturas están bien realizadas”.
CONSUMO ACUMULADO
Para aclarar qué fue lo sucedido con esta última facturación, el presidente del Consejo de Administración explicó que “a raíz de la pandemia, en determinado período no se hizo la toma de estado de los medidores por una cuestión de protocolo y, en su defecto, se tomaron mediciones estimadas que están contempladas dentro del Reglamento de Energía. Al empezar a regularizarse la lectura era posible que se produzca algún salto en la facturación y tiene que ver con el promedio que se hace y un consumo acumulado. Esto es para despejar cualquier tipo de especulación sobre alguna intencionalidad de daño hacia el asociado como he escuchado en algunas expresiones de algunos funcionarios y concejales, que ponen en duda lo que se facturó”.
FACILIDADES
Según ejemplificó Barquin, hay gente que pasó de pagar 3000 a 8000 pesos o de 2500 a 5400, y “estamos hablando de un porcentaje que no llega al 10 por ciento de los 24 mil asociados, pero también hay un 50 por ciento de los asociados residenciales que recibieron una facturación igual o menor a lo facturado en los meses anteriores y esto tiene que ver con las lecturas que arrojaron las mediciones que hicieron los trabajadores”. Ante esta situación, el presidente del Consejo de Administración aseguró que “estamos trabajando con el área Administrativa, con Facturación y se están revisando las distintas alternativas que se van a plantear para poder darle alguna facilidad al asociado para hacer frente a esa facturación. Lo estamos estudiando, pero puede ser a través de alguna bonificación, a través de alguna refacturación en algunos casos”. En los próximos días, desde la cooperativa comunicarán qué es lo que se decidió para que el socio pueda hacer frente a esta factura”.