Desde hace varios días un grupo de padres autoconvocados está avanzando con iniciativas para solicitar que vuelvan las clases presenciales, atentos a que durante todo el año en curso se desarrollaron las labores educativas de manera virtual, con todas las complicaciones que ello implica.
En este contexto, este domingo se impulsaron convocatorias y manifestaciones en distintos puntos del país. Esta propuesta fue impulsada por el colectivo Padres Autoconvocados de Chubut, y uno de los sitios donde se replicó esta movilización fue en Puerto Madryn.
En este marco, Fernando Sambrano, uno de los impulsores de la iniciativa, había mantenido una entrevista con El Diario donde se pronunció “preocupado por la situación de los chicos, porque este año por la pandemia no han tenido clases. Hemos tomado la posta porque vemos que no hay ninguna iniciativa por parte de las autoridades del Gobierno por crear protocolos y demás”.
En este mismo sentido, ayer lo que se buscó fue informar sobre las problemáticas que genera la falta de presencialidad en los establecimientos educativos y también para insistir con el pedido de que “abran las escuelas y nos aseguren la presencialidad el año que viene”.
Continuidad educativa
En cuanto a la situación particular de Chubut, donde desde 2016 no hay clases de manera normal, los padres autoconvocaron apuntaron que “eso es terrible, sobre todo para los chicos, más allá de todos los problemas que causan en el núcleo familiar que un chico no tenga clases. Esos chicos son una generación que les va a costar mucho insertarse en la sociedad el día de mañana”.
Si bien se remarcó que hay cierto entendimiento sobre las medidas de fuerza que están impulsando los trabajadores de la educación, en el marco del atraso salarial por parte del Gobierno Provincial, se esgrimieron cuestionamientos con que “los métodos llevados cierto tiempo deberían reconsiderarlos”.
En este sentido, Sambrano dijo: “En el núcleo familiar, lo que implica que el chico no vaya a la escuela es reacondicionar todas las actividades laborales nuestras, de acuerdo a que los niños están con nosotros y el estrés que genera para ellos el tener clases por Zoom”.
Por último, los padres autoconvocados subrayaron que “los chicos ya no quieren saber más nada con el Zoom. Cuesta muchísimo que se conecten, extrañan y han tenido actitudes fuera de lo normal por estar todo el día en su casa y con sus padres. Perdieron toda socialización con sus compañeros y los docentes”.
Presencialidad como regla
Este domingo, el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, se refirió al próximo ciclo lectivo, y afirmó que “el objetivo es el inicio en 2021 con la presencialidad como regla”.
Trotta, aseguró que se prevé para 2021 un inicio de clases «masivo» con los estudiantes en las escuelas de todo el país y precisó que el ciclo lectivo comenzará entre la tercera semana de febrero y la segunda de marzo, según las jurisdicciones.
«La presencialidad tiene que ser la regla y el eje ordenador de todas las decisiones que tomemos el año próximo, para poner en valor todos los aprendizajes de este año tan complejo», dijo a Télam el ministro y agregó que «por eso, para el inicio de las clases en 2021 vamos a tener un regreso masivo con todos los cuidados a las aulas».
En ese sentido, Trotta explicó que «gracias a la evidencia generada en este año de pandemia» se van a poder tener los recaudos sanitarios para que los estudiantes vuelvan a las aulas en todo el país.
«Las clases se iniciarán, según la jurisdicción, entre la tercera semana de febrero y la segunda de marzo. La mayoría va a arrancar el primero de marzo», aclaró.
El ministro sostuvo que el regreso a las aulas estará facilitado por la vacunación de los docentes, aunque advirtió que la disposición no está atada a eso.
«Siempre hemos dicho que no hace falta tener vacuna para la vuelta a clases. La vacunación de los docentes nos va a permitir que recuperemos la normalidad que nos arrebató la pandemia cuando haya una cobertura suficiente de la población», sostuvo Trotta.
El ministro recordó que «el proceso de regreso a la presencialidad se inició en el mes de mayo con las reuniones para redactar los protocolos, que ya se aprobaron en julio. En agosto comenzaron a volver unas provincias, algunas lograron sostenerlo y acelerar la marcha, otras tuvieron que poner en suspenso ese regreso por la realidad epidemiológica».