Uruguay dejó de ser el ejemplo exitoso de control de la pandemia y el pasado fin de semana se convirtió en el país que lidera los contagios a nivel mundial aunque, al igual que Chile, enfrenta la paradoja de ser al mismo tiempo uno de los que más ha avanzado en la campaña de vacunación.
De acuerdo con la página Our World in Data, que sistematiza información oficial sobre la pandemia, Uruguay encabeza la lista con 837 casos nuevos por cada millón de habitantes, lo que supera el registro del resto de los países y confirma una tendencia que ya se venía acentuando desde hace dos meses.
El Ministerio de Salud reportó que hasta ahora hay 117.757 casos, 1.101 de muertos y 89.035 recuperados. Tan solo durante la Semana Santa, que fue turística, murieron 186 personas, cifra que supera el total registrado a lo largo de 2020, que fue de 174.
Hasta febrero, Uruguay seguía siendo uno de los países menos afectados en cuanto a número de contagios y muertes, lo que en parte de explicaba debido a su tamaño, ya que cuenta con apenas 3,5 millones de habitantes. Pero las estadísticas comenzaron a aumentar al resentir el impacto de la llegada de las variantes brasileñas, en especial la que surgió Manaos, que es más contagiosa y peligrosa.