Se cumplieron tres meses del asesinato de Martín Alejandro “Tino” John (62 años, vecino del paraje Las Golondrinas, Lago Puelo) a raíz del accionar violento de las fuerzas de seguridad. A pesar de los intentos del Gobierno de Chubut de barrer bajo la alfombra el caso (el ministro de Seguridad, Federico Massoni, dijo que el 27 de mayo, al grupo policial GEOP “no le quedó otra alternativa que neutralizar la amenaza” y dispararle a Tino), la movilización social y la voluntad familiar de revelar la verdad han puesto en marcha la intervención judicial. El objetivo es lograr un juicio donde se establezcan las responsabilidades penales por un hecho que todavía conmueve a la comunidad local.
Este miércoles 8 se realizó una «autopsia psicológica» y una “prueba dinámica”, dentro de la etapa preliminar que permitirá a la fiscalía avanzar en la acusación formal y la apertura de la investigación. Tino, conocido y querido vecino de Las Golondrinas, padecía una patología psiquiátrica bajo tratamiento y había sido denunciado por realizar disparos en su campo el día anterior.
Su muerte a manos de Policía de Chubut constituye una más, en la larga lista de casos en los que no se respetaron los protocolos establecidos por la ley de salud mental ni los derechos humanos básicos. Mientras esto sucede, el ministro Massoni está cerrando su campaña política como candidato a senador nacional.
En la fiscalía de El Hoyo se realizó la “autopsia psicológica” a la que se presentaron Claudia Costa Basso (la pareja de Tino) y un ex empleado, quienes fueron entrevistados por la fiscal Marta Monge y un psicólogo del Ministerio Publico Fiscal. La misma tiene el objetivo de “brindar un perfil” de la víctima.
La jornada continuó con la «prueba dinámica», en la chacra donde vivían Tino y Claudia hasta el 27 de mayo, cuando el grupo “especializado” GEOP (al mando del ministro Massoni) irrumpió en su casa y mató al hombre de un disparo en la frente. Esta pericia, a cargo del Licenciado Criminalista del Equipo Técnico Multidisciplinario de la Procuración, Alberto Enes, es una “ambientación” (no una “reconstrucción”) de los hechos.
Acompañaron a Enes, los tres hijos de Tino, con sus abogados Edgardo Manosalva y Marcos Ponce (de la Defensoría Pública), la fiscal Monge, Policía Científica y El perito Enrique Prueger, contratado por Claudia Costa Basso. Ella, que presenció los hechos, que fue precintada por la misma policía dentro de su casa mientras Tino yacía muerto en el piso de arriba, no pudo ingresar a la pericia, al igual que su abogado Hugo Cancino, por una arbitrariedad de la fiscal Monge, que argumentó que sólo podría ingresar una persona por querella. Algo que extrañamente solo aplicó en su caso. «Hablan, improvisan, como si estuvieran haciendo cualquier cosa y aquí se cometió un asesinato. No es casual. Ante este intento de dejarnos afuera, decidimos con mi abogado que entre nuestro perito. Si bien somos tres querellantes, vamos todos para el mismo lado», aclaró Claudia
El abogado Manosalva señaló: “Uno de los pedidos iniciales era el apartamiento de la fiscalía, ya que se encuentra involucrada en el hecho. Aparte, llegaron luego de comenzado el operativo y no hicieron nada. No pidieron el secuestro de las cámaras, por ejemplo; las GoPro que supuestamente tenían. Los policías matan a Tino e inmediatamente los encierran en un vehículo de traslado, por horas. Ahí tuvieron tiempo de sobra para borrar todo el material de las cámaras”.
“Estamos armando el rompecabezas”, expresó sobre la investigación. Mencionó que “si bien hay un relato”, los peritos “no lo toman, sino que van a lo material”. Cuentan con tres informes (el del comisario y el subcomisario, ambos de El Hoyo, y el del GEOP). Sobre este punto: “Cabe resaltar que estos relatos no coinciden en la parte más crítica, los tres tienen lagunas”.
Cancino, abogado de la pareja, dio su mirada: “Está mal desde el principio hasta el final. Ahora hay que ver con todos los papeles en la mesa quiénes son los responsables, si es solamente quien efectuó el disparo, quien manejó el procedimiento, el que no citó al médico, el que no citó a la familia… hay muchas responsabilidades posibles”.
Hasta el momento hay un solo policía señalado (quien efectuó el disparo), al que se le comunicó la imputación judicial pero continúa en funciones.