“Infancia compartida” es una organización sin fines de lucro, conformada por hombres y mujeres, que tuvo sus orígenes en la provincia de Buenos Aires y actualmente se encuentra operando con alrededor de 50 personas en la localidad de Comodoro Rivadavia desde noviembre del año pasado, con la expectativa de ampliar su actividad en varias localidades más de Chubut.
El grupo se formó en la localidad petrolera por iniciativa de una abuela que luchaba judicialmente para poder ver a su nieta, junto a su hijo (padre de la niña), debido a que la madre de la pequeña les impedía a ambos tener contacto con ella.
Recientemente el equipo de Cholila Online se contactó con Facundo Debesa, uno de los miembros de la organización, con la finalidad de conseguir precisiones acerca del preocupante aumento de casos de una antigua “estrategia” utilizada por uno de los progenitores contra el otro a efectos de asumir el cuidado personal excluyente del hijo; y esa estrategia consiste en formular denuncias judiciales falsas.
El rol de esta organización se encuentra justamente dirigido a visibilizar esos casos.
Una denuncia falsa por violencia de género o por delitos sexuales puede ser suficiente para que un juez baje el martillo decretando el cuidado excluyente del hijo a manos del progenitor denunciante, quitándole toda posibilidad al otro de tener contacto con el niño.
A pesar de que “Infancia Compartida” tiene como objetivo acompañar a ambos progenitores (padre y madre) en la hipotética situación descripta; durante el dialogo con este medio, Facundo se mostró preocupado debido a que en la mayoría de los casos que llegan a su conocimiento, las autoras de estas tretas infamantes son mujeres y las verdaderas víctimas son hombres, que como consecuencia pierden la posibilidad de tener una relación normal con sus hijos.
“Se le dio la posibilidad a la mujer de denunciar sin pruebas y así obtener una perimetral, que hoy en día se está usando para alejar al papá de los chicos” nos comenta Facundo.
Es preocupante, puesto a que se suma como agravante el hecho de que la justicia argentina, influenciada por la política de género, tiende a fallar en favor de la mujer dándole prevalencia al más simple argumento en la mayoría de las veces.
Además, el alto grado de sensibilidad que produjeron en la población los casos de violencia contra la mujer, fueron utilizados políticamente por los poderes de turno durante años, ocasionando la construcción de un relato sesgado y altamente perjudicial, dando como resultado la siguiente premisa social: “todo hombre que sea denunciado por una mujer es culpable, independientemente de que la denuncia sea falsa o no”.
Se advierte también la complicidad de la mayoría de los medios de comunicación al nivel nacional, que operan ferozmente a favor de estos lineamientos; y como consecuencia, padres violentados por sus parejas no tienen las mismas posibilidades que éstas últimas de dar a conocer las situaciones que deben afrontar.
Facundo Debesa, además de ser una de las caras visibles de esta agrupación también nos cuenta que le toca ser una víctima de hostigamiento frecuente de parte de su ex – mujer, quien según nos ha dicho, llegó a privarlo de ver a su hijo aproximadamente por seis meses.
Facundo ha querido ponerle un freno judicial varias veces a su ex – pareja, pero por motivo de que no le han querido tomar la denuncia en ninguna comisaría, ha desistido de continuar.
Facundo se mostró satisfecho con la agrupación en el sentido de que está teniendo buena recepción en la sociedad y va creciendo cada vez más el número de integrantes.
Este martes pasado por la mañana, “Infancia compartida” se hizo ver con grandes pancartas en las inmediaciones del Juzgado Civil y Comercial N° 3 de Comodoro Rivadavia. Sus miembros se convocaron allí con el objeto de solidarizarse con los padres que mantienen litigios civiles en curso con las madres de sus hijos, y tienen el expediente “pisado” en dicho juzgado, lo que les impide ver a los chicos.
“Infancia Compartida” se hizo presente en el acceso al edificio del Juzgado N° 3 en lo Civil y Comercial de la localidad de Comodoro Rivadavia.
Facundo nos comentó que las movilizaciones al frente del edificio público “les molestó a los magistrados”, se basa en el testimonio de un padre que le contó que tuvo un dialogo con una jueza, donde ésta le aseguraba que “su caso iba a marchar bien e iba a poder ver a su hijo pero que tratara de no llevar a cabo esas reuniones en las puertas del juzgado (refiriéndose a las manifestaciones)”. Por el momento vamos a reservarnos el nombre de la magistrada.
“Las movilizaciones en el juzgado tienen como fundamento expresar que ya por medio de los papeles no se puede… hay padres que llevan dos años sin ver a los hijos” refiriéndose a la inacción de la justicia. “Simplemente se trata de dejarnos ser papás, nada más” recalcó Debesa.
En la actualidad se cree que los hechos conocidos de hombres que sufren violencia de género y son impedidos de ver a sus hijos por las madres son apenas la punta del Iceberg; hay una inmensa cantidad de hombres que están en la misma situación, pero se mantienen en perfil bajo debido a que son ignorados por las entidades responsables de brindarles ayuda, hasta que ocurre un desenlace fatal de repercusión nacional como lo fue el caso “Lucio Dupuy”, ocurrido en La Pampa el año pasado, donde una jueza le negó el cuidado del pequeño de cinco años al padre, concediéndoselo a la madre en su totalidad. Poco tiempo después, Lucio terminó siendo asesinado brutalmente por la madre y la novia de ésta. Como siempre… cosas que se pudieron haber evitado.
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