Las tres convocatorias previas ya otorgaron beneficios por $ 590 millones a las compañías inscriptas, informó el Ministerio de Desarrollo Productivo.
El presidente Alberto Fernández envió hoy al Congreso el Proyecto de Ley del Promoción del Desarrollo y Producción de la Biotecnología Moderna y la Nanotecnología, que extiende hasta 2037 la vigencia del régimen de beneficios fiscales a la industria y amplía su alcance a las actividades que incorporan nanotecnología.
Las tres convocatorias previas ya otorgaron beneficios por $ 590 millones a las compañías inscriptas, informó el Ministerio de Desarrollo Productivo.
“Argentina está dentro de los primeros 20 países del mundo con mayor cantidad de empresas biotecnológicas, con más de 200 compañías a nivel local. La mitad fueron creadas a partir de la Ley 26.270 de 2007, para el Desarrollo y Producción de la Biotecnología Moderna, sancionada durante el gobierno de Néstor Kirchner, cuya vigencia concluye este año”, resaltó el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, en un comunicado.
Además, destacó que “el objetivo de la Ley de Nanobiotecnología es promocionar las industrias innovadoras que aplican la biotecnología y nanotecnología a sus productos, como la salud humana y animal, el agro, medio ambiente y energías renovables, entre otras”.
La nueva ley contempla que quienes accedan al régimen de promoción podrán obtener beneficios de amortización acelerada del impuesto a las Ganancias en una cuota, devolución anticipada del IVA y el otorgamiento de un bono de crédito fiscal correspondiente al 50% de los gastos pagados destinados a las contrataciones de servicios de investigación y desarrollo (I+D) con instituciones del Sistema Público Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Las tres convocatorias (2019-2020-2021) del Régimen de Promoción de Biotecnología Moderna ya otorgaron beneficios por $ 590 millones a las empresas inscriptas.
La subsecretaria de Economía de Conocimiento, María Apólito, destacó que “la biotecnología y la nanotecnología son algunas de las principales fuentes de innovación tecnológica y transformación productiva”, y consideró que “por lo tanto es un factor preponderante para el proceso de crecimiento y desarrollo de la economía nacional”.
“Es un área que sirve de plataforma tecnológica para numerosas disciplinas y sectores productivos”, afirmó la funcionaria.
Desde el sector privado, el presidente de Laboratorios Richmond, Marcelo Figueiras, afirmó a Télam que la iniciativa del Gobierno “es una noticia muy positiva”.
“Este tipo de beneficio es claramente una de las tantas acciones que fomentan el desarrollo de la industria biotecnológica y la nanotecnología a nivel nacional”, destacó el empresario.
Subrayó que “especialmente esta ley provee una serie de beneficios impositivos muy concretos que las empresas capitalizan para sustentar proyectos de investigación y desarrollo que en el largo plazo siguen cimentando el posicionamiento de Argentina como uno de los países con mayor cantidad de empresas de biotecnología a nivel mundial”.
“Creo que este tipo de acciones refuerzan el valor de lo científico como un gran pilar para el desarrollo de nuestro país”, sostuvo Figueiras, quien remarcó: “Bienvenidos los estímulos para las empresas que toman el desafío de nuevos proyectos, que desarrollan y producen en Argentina con impacto global. Es muy positivo para el desarrollo de la ciencia en nuestro país”.
En cuanto a la inclusión de la nanotecnología en la Argentina, se observa un importante surgimiento del sector, cuyo campo comprende toda aplicación tecnológica del conjunto de técnicas y ciencias en las cuales se estudian, manipulan y obtienen, de manera controlada, materiales, sustancias y dispositivos de dimensiones nanométricas (diminutos), los cuales presentan propiedades especiales por su tamaño”.
Al ser un área de desarrollo horizontal y multipropósito, de la economía del conocimiento, puede generar avances y nuevas tecnologías para sectores productivos, como el de la salud, el textil, la microelectrónica, el industrial, el químico y el agroindustrial, entre otros.
Un ejemplo de la relevancia cada vez mayor del sector está en el campo de la salud que, mediante el uso de la biotecnología, ha demostrado una gran capacidad de respuesta durante la pandemia de Covid-19, colocando a la Argentina entre los países con mayor potencial para el desarrollo de soluciones biotecnológicas como kits diagnósticos, el tratamiento con suero equino hiperinmune y desarrollos iniciales de vacunas.