El intendente de Comodoro Rivadavia, Juan Pablo Luque, hizo entrega ayer de una nueva vivienda social, esta vez en barrio Quirno Costa, a un padre que vivía con sus dos pequeñas hijas en una casa de chapa con baño afuera. «Existen situaciones de urgencia y desde el Estado tenemos la obligación de dar respuestas», sostuvo el jefe comunal.
Desde la actual gestión municipal, según se destacó, se continúa avanzando en acciones sociales con el objetivo de mejorar la calidad de vida de todos los comodorenses. En ese sentido, se está llevando adelante un plan mediante el cual se llevan otorgadas 75 viviendas -entre prefabricadas y casas de mampostería, dormitorios con baño y módulos habitacionales- a familias que requerían de rápidas soluciones habitacionales.
En esta ocasión, la entrega tuvo como beneficiario a Fabián Mancilla y sus hijas, quienes residían en un lugar que no reunía las condiciones mínimas para vivir de forma digna y, a partir de ahora, cuentan con un hogar construido con materiales y equipamiento de calidad.
Al respecto, Luque manifestó que «tratamos de llegar a este tipo de casos, con problemáticas urgentes, que necesitan de nuestra ayuda».
«Nosotros no somos el Instituto Provincial de la Vivienda ni el gobierno provincial, que pueden construir 300 o 400 casas por año, pero nuestra Municipalidad tiene un corazón enorme para aquellas personas que tienen problemas urgentes y merecen el acompañamiento», recalcó.
En ese sentido, indicó que «este trabajo se lleva a cabo desde la Secretaría de Hábitat de la cartera de Obras Públicas, que, junto a otras áreas municipales, fijan las prioridades donde corresponden para concretar viviendas de primera calidad, que realmente les cambie la vida a las familias, brindándoles un lugar cómodo, con instalaciones de primera categoría».
Del mismo modo, el jefe comunal destacó que «cuando comenzamos la gestión, dijimos que pretendíamos realizar viviendas de calidad y llegar a la mayor cantidad de familias posible. Este plan viene funcionando muy bien y el trabajo se viene haciendo muy rápido, ya que las casas se pueden construir de forma veloz, lo que nos pone muy contentos porque vamos cumpliendo lo que prometimos».
«Nosotros entendemos que la palabra empeñada tiene un precio muy importante, por eso le ponemos mucha energía y hacemos un gran esfuerzo económico para concretarlas, dado el costo que tiene construir más de 50 viviendas por año», puntualizó.
Por último, Luque recalcó que «existen situaciones de urgencia y desde el Estado tenemos la obligación de dar respuestas. Estamos atentos para dar respuestas y volcamos recursos económicos permanentemente en la cuestión social. El trabajo silencioso que estamos haciendo en este sentido es muy fuerte».