En un momento de mucha tensión y bronca por haber perdido la final del Trofeo de Campeones ante Racing y dejando una imagen que distó de ser la ideal, Juan Román Riquelme tuvo un gesto ejemplar con los futbolistas de Boca Juniors ni bien terminó el encuentro en Villa Mercedes, San Luis.
Una vez que el árbitro Facundo Tello marcó el final tras la expulsión de Darío Benedetto, los jugadores xeneizes se marcharon hacia el vestuario con el lógico enojo por haber perdido la final y con intenciones de no quedarse a la entrega de medallas. Lo que no sabían era que allí estaba Riquelme, esperándolos.
“Los jugadores estaban buscando las copas e iban a salir a refregárselas a los jugadores de Racing. De hecho, Agustín Rossi agarró una y estaba enfilando al campo de juego. Estaban re calientes… Hasta que apareció Riquelme en el vestuario. Les dijo que eso no se hace, que salgan, acepten la medalla y se la banquen”, señaló el periodista Andrés Turco Alaluf en la transmisión radial de El Show de Boca, desde el campo de juego.
El cronista agregó que Román palmeó en el pecho a cada uno de los futbolistas en señal de reconocimiento por el gran año que tuvieron, tras gamar la Copa de La liga y la Liga Profesional. Un gesto del ídolo fue similar al que hacía el recordado Carlos Timoteo Griguol cuando dirigía a Gimnasia y Esgrima La Plata.
El vicepresidente del Xeneize y líder del Consejo de Fútbol estuvo muy pendiente del plantel en las horas previas a la final con Racing y tuvo un gran gesto en el hotel con cada integrante del grupo que encabeza Hugo Ibarra. Los abrazo uno a uno y les dio un mensaje de aliento.
Durante el partido, a Riquelme se lo observó en uno de los palcos del Estadio Único de Villa Mercedes junto a su mate y, lógicamente, sufrió por el resultado adverso de su equipo. De hecho, las cámaras captaron el momento en el que se fue expulsado Alan Varela en el primer tiempo suplementario.