En los últimos 33 meses los docentes de Chubut han sido los que más ingresos han perdido entre los trabajadores estatales de la provincia. La inflación ha destrozado sus salarios y desde diciembre de 2019 perdieron 31,9% del poder adquisitivo. En la actualidad necesitarían sumar por lo menos 37.126 pesos en sus sueldos de bolsillo para empatar con la estampida inflacionaria. No todos los sectores de la administración pública y algunos ámbitos del Estado provincial han conseguido equipar la suba de precios.
La pérdida de poder adquisitivo de los salarios docentes es impactante en Chubut, porque están soportando el ajuste que les impide recuperarse frente a los durísimos impactos de la inflación de los años 2020 y 2021.
Los salarios de los trabajadores de la educación están entre los más afectados por la suba de precios y los aumentos. El modesto bono de 18.000 pesos que otorgó el gobierno provincial este año no hizo posible cubrir todo lo que perdieron en los dos años anteriores.
El deterioro salarial es muy notorio. El sueldo de bolsillo de un docente ingresante ha quedado 31,9% por debajo de lo que fue la suba inflacionaria producida desde diciembre de 2019 hasta septiembre de este año.
Esa falta de actualización por los años anteriores significó que cada trabajador de la educación deje de percibir por lo menos 37.126 pesos por mes y por consiguiente se aleje cada vez más de la posibilidad de escaparle a la pobreza con un solo cargo.
La diferencia con otros sectores de los estatales chubutenses es muy significativa, ya que por ejemplo el sector de los Judiciales equiparó a la inflación del mismo período y terminó dejando los sueldos de bolsillo 1,8% por encima de la suba de los precios.
El ajuste que lleva adelante la gestión de Mariano Arcioni y el ministro de Economía, Oscar Antonena, impacta sobre por lo menos la mitad de los estatales chubutenses que están representados por los docentes de escuelas iniciales, primarias y secundarias.
Aunque escasea la información oficial, el mismo efecto estaría teniendo la falta de recomposición salarial sobre los auxiliares de la educación y unos pocos sectores más de la administración pública provincial.
Pérdida de 32% en 33 meses
La diferencia entre lo que cobra un docente ingresante en Chubut y lo que debería cobrar si su salario le hubiera empatado a la inflación es del 31,9%; lo que se traduce en una pérdida a lo largo de 33 meses de 37.126 pesos de poder de compra mensual.
Tamaña diferencia surge de comparar los 34.906 pesos que cobraba de bolsillo en trabajador docente en diciembre de 2019 -último mes con la aplicación de la cláusula gatillo- con los 116.435 pesos que debió percibir en septiembre de este año si el salario hubiese sido ajustado por inflación.
En septiembre el sueldo de bolsillo llegó a los 79.309 pesos, incluyendo los aumentos otorgados por el Gobierno provincial y el bono de 18.000 pesos.
Sin embargo, la inflación acumulada de 33 meses ascendió a 233,6% desde diciembre de 2019 hasta septiembre del 2022, lo que representó un incremento de los precios con 54,9% de promedio anual y escalada sostenida del 3,7% mensual.
Cuando se aplica ese porcentaje de inflación sobre los sueldos se observa que la pérdida alcanza el 31,9%, pero para que el salario docente de septiembre se equilibre con la corrida inflacionaria debe incrementarse todavía más y experimentar una suba del 48,6% para poder empatar con la suba de precios llegando a los 116.435 pesos de bolsillo.
Docentes entre la pobreza y la indigencia
El deterioro del sueldo docente respecto de la canasta familiar es evidente, porque refleja cómo el ajuste impacta de lleno en el poder adquisitivo.
En diciembre de 2019 la Canasta Básica Total (CBT) que mide el Observatorio de Economía -conducido el contador y profesor universitario César Herrera- se ubicaba en Comodoro Rivadavia en 43.696 pesos, por lo que los 34.906 pesos de bolsillo que cobraba un docente le permitían cubrir apenas 79,9% de los gastos para no ser pobres.
En conclusión, solamente si ese trabajador de la educación contaba con dos cargos o las horas cátedra equivalentes recién así lograba superar en un 60% el costo de la CBT mensual.