La Municipalidad acompañó este jueves la presentación del libro «Del otro lado del mar, vivencias de Gustavo Aragolaza», en el Foyer del Centro Cultural «José Hernández». El libro cuenta la historia de vida del exarquero y actual DT de fútbol que surgió de Germinal de Rawson y que desarrolló una amplia trayectoria que incluyó clubes de Chile, Estados Unidos, España e Italia, donde reside desde hace 11 años.
El acto contó con las presencias del protagonista del libro; del autor, Julio Dimol; del colaborador de la publicación, el periodista Juan Bigrevich; del presidente de Germinal, Pedro Bravo González; de la coordinadora de Patrimonio Histórico y Museos de la Municipalidad, Patricia Lorenzo; de la concejala Anahí Olivera, exjugadores del club, familiares y amigos de Aragolaza, de 38 años.
Lorenzo destacó el libro que cuenta «la vida y la trayectoria de alguien que ha sido un embajador de Rawson en el exterior, surgiendo desde nuestro querido Club Atlético Germinal».
«El libro, en la pluma de Julio Dimol, ha podido plasmar en letras su vida, su trayectoria como arquero y ahora como director técnico», valoró la funcionaria.
Detrás de un sueño
Aragolaza, por su parte, calificó de «emocionante» a la presentación. «Le conté a Julio mi historia desde chico, cuando iba al club caminando, cuando pasaba a buscar a los amigos», comentó.
«Fui creciendo, empecé a jugar en Primera, con Julio que ya se estaba retirando, con Cachito Ruiz Díaz, que para mí eran ejemplos de vida. Después mi locura de irme muy joven a Chile, donde todavía tengo amigos que llevo en mi corazón», recordó.
«Volví a Germinal, jugué en los Torneos Argentino A y B, luego a la CAI de Comodoro donde también viví momentos hermosos, me fui a Estados Unidos, a España, volví a Estados Unidos, donde me pasaron cosas lindas. Y me fui a Italia, donde ya hace 11 años que estoy», resumió.
«Toda la vida detrás de un sueño. Yo traté y trato de ser feliz. Les agradezco a todos, al Municipio, a todos los que estuvieron al lado mío en las buenas y en las malas», finalizó.
Decisiones
En tanto, Julio Dimol, que además compartió plantel con Aragolaza, comentó: «El libro nació en 2018. Yo estaba de viaje en Italia, y acordé con Gustavo ir a verlo. Fuimos a ver los entrenamientos. El mismo comportamiento que tiene acá lo tiene allá. La gente lo quiere de la misma manera. Gustavo es una persona muy querible, tiene una luz especial».
«Había muchas cosas que no conocía. Y me sorprendí. Hay decisiones en la vida, caminos para tomar, y el resultado se ve con el tiempo. Gustavo, buscando su sueño, ha tomado decisiones. Algunas desde mi punto de vista alocadas, otras excepcionales, porque perseguir el sueño en la vida no es fácil, no es para todos», reflexionó.
En este sentido dijo que «algunas de las decisiones y las locuras que hizo le costaron caras y en otras le fue bien. Pero siempre se jugó», y añadió que el libro cuenta la historia del exfutbolista pero también la de Rawson.
«Sería bueno que empecemos a respetarnos y a queremos más, porque muchos de los rawsenses que se han ido han marcado huellas y a veces no nos damos cuenta, hasta que transcurre la vida», finalizó.
El periodista Bigrevich calificó de «privilegio» haber participado en la redacción del libro «por la relación deportiva y personal».
«Es un homenaje a Gustavo, y con el mensaje de buscar el éxito, que cada uno lo busca a su manera: material, espiritual, económica. Más allá de las fronteras, uno quiere ser feliz, y ese es el éxito, con su familia, con lo que tiene, y con los objetivos que uno busca. Ser millonario es que cuando llegues, los que se den vuelta, se sonrían. Por eso le deseo a Gustavo que siga teniendo el mayor de los éxitos y que sea feliz», expresó.
Por último, Pedro Bravo González destacó: «Gustavo es un amigo de la infancia y de la vida. Es muy importante su referencia cuando uno comparte todos los días con chicos que ante la primera frustración abandonan, no luchan. En ese sentido Gustavo es un ejemplo».
«Creo que hay que valorar lo que representa Gustavo como rawsense más que como amigo, y como deportista. Es largo el camino, recién tiene 38 años, es joven y tiene mucho para dar. Para nosotros la zona de confort es un lugar difícil de salir y él tomó una decisión que nos pone orgullosos», finalizó.