El Legislativo provincial aprobó un presupuesto 9.283 millones de pesos, siendo así la provincia que más incrementó sus partidas. El vicegobernador Ricardo Sastre precisó que este dinero «es absorbido casi en su totalidad por la masa salarial, tanto de empleados como diputados».
Más de la mitad de las legislaturas provinciales del país ostenta presupuestos millonarios que desafían, incluso, las estimaciones más pesimistas que auguran una inflación de tres dígitos para este año. Pese al clamor ciudadano que demanda gestos de austeridad en la dirigencia política, al menos quince legislaturas arrancan este año con partidas que superan el 100% de inflación respecto de enero de 2022.
De acuerdo a un relevamiento que realizó el diario La Nación, el distrito que encabeza el podio es Chubut, cuya legislatura se aprobó un presupuesto 9.283 millones de pesos, un 203% más alto que el del año pasado. Le sigue Tucumán, uno de los casos más escandalosos: después de Buenos Aires, su legislatura exhibe el presupuesto más alto del país, con casi 34 mil millones, un 152% más que en 2022. Semejante gasto, que tiene como ícono uno de los edificios más imponentes del país, contrasta con una situación social acuciante: según la última medición del INDEC, el 40,9% de los habitantes del Gran Tucumán vive en condiciones de pobreza e indigencia.
El ránking lo completan las legislaturas de Jujuy (+138%); la ciudad de Buenos Aires (+135%); Corrientes (+132%); Buenos Aires (+123%); La Pampa (+126%); Neuquén (+124%); Santiago del Estero (+122%); Entre Ríos (+120%); Santa Fe (+120%); Río Negro (+118%); Salta (+117%); Córdoba (+109%) y Mendoza (+105%).
Si estas subas presupuestarias impactan por su magnitud, mayor sorpresa generan las explicaciones con las que las autoridades provinciales intentaron justificar los aumentos ante la consulta de La Nación. En Chubut, por caso, el aumento del gasto legislativo triplica incluso la proyección inflacionaria estimada por el gobernador Mariano Arcioni en el presupuesto provincial.
«Nuestro presupuesto es absorbido casi en su totalidad por la masa salarial, tanto de empleados como diputados. De los tres poderes del Estado, somos el que menos aumento tuvo. Estamos por debajo de los poderes Judicial y Ejecutivo», aseguró a La Nación el vicegobernador y presidente de la Legislatura, Ricardo Sastre.
Según explicó, los incrementos fijados a los legisladores están atados a los que se fijan para los empleados. Sastre sostuvo que «no hubo aumento de la planta de personal, aunque sí un incremento de ítems tales como los gastos de bloque, que pasaron de los 50 mil pesos a los 150 mil pesos por diputado por mes este año».
Fuentes de la Legislatura, en tanto, aseguraron que el aumento registrado este año responde a un «sinceramiento del presupuesto». Según explicaron, «en los dos años anteriores los presupuestos fueron bajos y se ajustaban en el transcurso de cada período con ampliaciones presupuestarias. Pero ahora, en un año electoral, se decidió poner un número real para no tener problemas en medio de las campañas y elecciones con ningún tipo de ajuste».
TUCUMÁN, UN AGUJERO NEGRO
El caso de Tucumán es llamativo no solo por la magnitud de su presupuesto legislativo sino por la opacidad en la publicación de los datos. El gasto de su Legislatura -que cuenta con 49 miembros- es el secreto mejor guardado de todo el presupuesto; de hecho, no figura en la ley. La Fundación Libertad, que realizó un informe sobre los costos de las legislaturas provinciales durante 2022, indica que el presupuesto legislativo tucumano fue de 13 mil, 415 millones de pesos.
Respecto de este año, el ministro Economía tucumano, Eduardo Garvich, dio como única pista al diario La Gaceta que el gasto de la Legislatura representará en 2023 el 4,3% del presupuesto general de la administración tucumana. De este dato se desprende que a la Legislatura se le asignaron 33 mil, 916 millones de pesos para todo el año, la cifra más alta del interior del país. Esta cifra implica un aumento del 152,8% respecto del año pasado
Según consigna el diario La Gaceta, fuentes del palacio legislativo tucumano explican que el grueso de los gastos se destina al pago de personal, seguido por los costos de funcionamiento y el boleto estudiantil gratuito. Más allá de las explicaciones, lo llamativo es que el presupuesto de la legislatura de Tucumán sextuplica el de Jujuy, pese a que ambas poseen idéntica cantidad de legisladores.
En la ciudad de Buenos Aires, el aumento presupuestario de su legislatura también tiene su justificación: el 11 de setiembre último su sistema informático fue víctima de un ciberataque que dejó inservibles sus servidores y, como consecuencia de ello, quedaron dañados sus sistemas internos y, junto a ellos, el registro histórico y administrativo de la institución. Las autoridades legislativas debieron decretar la emergencia e inmediatamente ordenar la compra de nuevo equipamiento, lo que demanda una inversión millonaria, explicaron a La Nación.
«Durante los últimos años la Legislatura ha llevado adelante acciones de austeridad y fuerte control de gastos; de hecho, el presupuesto ejecutado de 2022 fue un 29% inferior al de 2018 en términos reales. De no haber sucedido el ciberataque, el aumento hubiera sido aún menor ya que no hubiesen sido necesarios estos gastos», señalaron fuentes legislativas porteñas, quienes añadieron que parte del incremento presupuestario también se asignó a poner en funciones nuevamente a la Legislatura luego de dos años de permanecer cerrada durante la pandemia.
En Corrientes, donde el aumento del presupuesto legislativo trepó al 132%, voceros y referentes de la institución explicaron que dicho incremento acompaña el ritmo y porcentaje asignado a los otros dos poderes del Estado provincial.
«Lo que aumentó es el presupuesto general, porque el porcentaje del Poder Legislativo se mantuvo exactamente igual, es decir, el equivalente del 2% del presupuesto provincial. Casi el 7% es del Poder Judicial y el resto es del Poder Ejecutivo», explicaron voceros del Departamento de Administración del Senado.
Un senador opositor, que pidió reserva, confirmó la suba, aunque la justificó. «El presupuesto del año pasado estuvo muy subestimado, por eso las variaciones están todas por encima del 100%. La pauta macro-fiscal del 2022 era 35% de inflación y fue del 95%; más 60% de este año. Que aumente más del 100% es un número muy lógico», cerró.
Desde Santiago del Estero, voceros del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo confirmaron el incremento del 122% de la legislatura provincial, aunque indicaron que el presupuesto asignado para este año es el más bajo comparado con el resto de las legislaturas del país. En efecto, según la ley aprobada la partida destinada la Cámara de Diputados local, integrada por 40 legisladores, es de 1 mil, 275 millones, 348 mil, 118 pesos, uno de los presupuestos más reducidos del país. Misiones, con idéntica cantidad de legisladores, tiene un presupuesto que lo cuadruplica. Incluso la legislatura de Tierra del Fuego, con solo 15 miembros, tiene un presupuesto superior de poco más de 3.800 millones de pesos.
«La Legislatura santiagueña es la más austera del país, son números que cualquiera los puede confirmar, y su gasto no llega a representar el 1% del presupuesto total de la provincia», enfatizó el ministro de Economía Atilio Chara.
Lo cierto es que, si se toma el conjunto de las legislaturas provinciales, sus presupuestos aumentaron en promedio un 110% respecto de 2022. Muy por encima de la inflación proyectada para este año (60%) y de la inflación acumulada el año pasado, del 94,8%. En comparación, el Congreso nacional, con sus dos cámaras, tuvo un aumento presupuestario más módico para este año: «apenas» del 61% promedio.
Fuente: La Nación