El gobernador electo del Chubut, Ignacio Torres, denunció que la actual administración está incorporando gente a poco más de 100 días de irse, en una clara maniobra de acomodar a los propios y «explotar» al Estado del que él deberá hacerse cargo él desde el 10 de diciembre.
Además repudió que se le adjudiquen obras a quienes no hicieron las que se les adjudicó, como una de las empresas que no hizo nada en el interconectado eléctrico a Camarones, a pesar que le hicieron el adelanto y encima se aprestan a adjudicar otra obra.»No sé si es torpeza o choreo» dijo elocuente.
Torres acusó a quien reemplazará en breve, Mariano Arcioni, como el principal responsable de lo que pasa porque se había comprometido a no hacer lo que está haciendo y, lo que es peor, está sentado sobre los papeles para «ocultar información».
Por el contrario, valoró la actitud de los propios ministros quienes son los que lo abastecen de datos, preocupados por lo que les puede pasar.
Sobre ese punto aclaró que todo lo que hagan hoy, la van a tener que explicar en sede judicial.
Admitió que podrá pasarle algún caso que de inmediato no descubra, pero no transcurrirán muchos meses hasta que descubran quiénes son, por lo que los van a llamar de a uno para saber dónde trabajaban y que horarios cumplían.
Deschavó el caso puntual del ministro que se prepara un cargo especial para quedarse para siempre.
También hizo pública la maniobra para crear un fuero contencioso administrativo en Comodoro Rivadavia, con la clara intención de «apalancarse» ahí y favorecer la industria del juicio.
Aseguró que no se dejará llevar por los adulones porque «a mí nadie me enrosca la víbora» aseguró.