Investigadores de la Universidad de Nuevo México (UNM) descubrieron que las aves migratorias nocturnas enfrentan un mayor riesgo de colisión con edificios iluminados con altos niveles de luz azul durante la noche. Este fenómeno, hasta ahora poco estudiado, se revela como una amenaza significativa para la fauna migratoria.
El estudio, publicado en Conservation Biology, destaca que este fenómeno no es exclusivo de una región particular, sino que tiene implicaciones globales. Sin embargo, la comprensión de estas colisiones entre aves y estructuras aún presenta lagunas significativas en la investigación científica.
Según estimaciones en América del Norte, entre 365 y 988 millones de aves mueren anualmente por choques contra edificios. Este dato resalta la urgencia de abordar el problema y desarrollar medidas de mitigación efectivas.
Los científicos, liderados por David Tan y Nicholas Freymueller de la UNM, adoptaron un enfoque novedoso al recopilar observaciones de aves muertas en toda la isla de Singapur. Utilizando modelos de nichos ecológicos, reconstruyeron el «nicho de muerte» de las aves en la ciudad.
El estudio reveló que las aves migratorias, en particular las pittas, son las más afectadas por las colisiones con edificios, mientras que las especies residentes, como las palomas, también enfrentan un riesgo significativo. Estos hallazgos proporcionan información crucial para identificar áreas de alto riesgo y aplicar medidas preventivas.
Fuente: El Mundo.