Se cumplieron seis meses desde que Ignacio “Nacho” Torres juró como nuevo Gobernador del Chubut. El semestre viene con balance y para aquellos que integran la mesa chica del gobierno el saldo es positivo. Pero también tienen claro que será necesario refrescar el gabinete para darle otro impulso a la gestión.
Hace exactamente seis meses atrás Nacho Torres fijaba a su equipo dos objetivos primordiales: iniciar el ciclo lectivo con alumnos y docentes en las aulas; desactivar lo que denominó una “bomba financiera” por los vencimientos de deuda que se venían encima.
Con esos dos puntos sintetizan la historia reciente de Chubut; un Estado que no paraba de tomar deuda para cumplir con el pago de sueldos, y que cayó en la crisis más profunda y dolorosa como condenar a una generación al semi-analfabetismo por no poder garantizar el dictado de clases durante más de 6 años.
Los dos objetivos se lograron: en marzo el ciclo lectivo se inició como no ocurría en mucho tiempo, y algún tiempo después se cumplió con los vencimientos de pago que tenía la provincia y sin recurrir a más deuda. A partir de ahí, los objetivos son otros.
Transparencia y obra pública
Que Chubut venga repitiendo el último lugar en el ranking de transparencia es una de las cuestiones que obsesiona al gobernador Torres. Y una batería de proyectos se presentaron para mejorar ese status. Ley de Transparencia en la Obra Pública, ampliación de Ficha Limpia, Ley de Extinción de Dominio, por nombrar algunos avances. Aunque no es ningún secreto que la transparencia sólo es posible por acción de los hombres y mujeres, de los funcionarios de turno.
Y el contexto no fue ni es fácil, con un Gobierno nacional sentado sobre la caja y con una planilla Excel en la pantalla como guía de gestión. No era factible en diciembre o enero pensar que la gestión de Javier Milei podría desembolsar un solo peso en obras necesarias para Chubut. Sobre el filo de este primer semestre Torres logró firmar con Guillermo Francos, devenido en jefe de Gabinete, el convenio por obras por más de 150 mil millones de pesos. Y habrá una segunda carpeta con otras prioridades planteadas por Chubut.
La convivencia con la gestión Milei es tensa, con intervenciones judiciales de por medio y cruces mediáticos de alto voltaje. Pero la llegada de Francos a la Jefatura de Gabinete abrió un canal de diálogo con el verdadero responsable de las relaciones políticas del Gobierno nacional.
Los objetivos de Ignacio Torres
Apenas seis meses de gestión lleva Ignacio Torres y hay problemáticas que no pueden tener soluciones tan pronto. En materia de seguridad, por remitir a uno de los principales reclamos de la sociedad, hay incipientes acciones para una mejora en su tratamiento. En cuanto a generar empleo, se requiere dar garantías y mostrar primero una provincia ordenada para atraer nuevas inversiones.
Aunque no lo parezca, estamos en presencia aún de un nuevo gobierno. Se vendrá ahora una etapa de renovación en el equipo de trabajo del Gobernador con cambios ya más que anunciados de manera extraoficial. Ya mostró indicios Torres de los próximos objetivos y paralelamente sigue la construcción política.
De hecho, la incipiente nueva conformación del gabinete será una muestra de ese frente que ya agrupa al PRO, a la UCR, a peronistas, ex libertarios, intendentes que no quieren perder el tren y tienen la capacidad que les da la experiencia para olfatear por dónde se orientan las posibilidades de triunfo.
El Gobierno provincial hace un balance de toda ganancia al cerrar el semestre. Pero la gestión no permite dormirse y Torres sabe que para alcanzar los nuevos objetivos debe sumar a su espacio y también oxigenar el equipo. En eso está y habrá novedades muy pronto.