La médica pediatra Adriana Rogers dialogó este lunes con Radio 3 y cuestionó que el fiscal Daniel Báez no responsabilizó a 28 personas que habrían abusado del menor.
La médica pediatra Adriana Rogers criticó este lunes al Poder Legislativo y a la Justicia de Chubut por su accionar en todo lo relacionado con la causa conocida como “Pirámides”, en la cual se condenó a 16 y a 14 años a una madre y su pareja por abuso sexual gravemente ultrajante contra un menor de edad.
Tras la solicitada difundida por la Red de Infancia Robada, Rogers dialogó con Radio 3 y recordó que durante la investigación se comprobó que “la madre tarifaba los servicios sexuales de su hijo en Pirámides. Hay 28 clientes identificados. Ellos están libres y siguen apareciendo víctimas de estos personajes”.
Tras ello, la especialista sostuvo que “lo que pasó con la causa original es lamentable” y sostuvo que el fiscal de ese entonces, Daniel Báez, fue “premiado” con un alto cargo en el Superior Tribunal de Justicia porque permitió que la investigación no avance.
“Báez tendría que haber sido destituido y debería enfrentar un juicio penal. La Cámara Acusar de la Legislatura dijo que había que hacerle juicio político, los argumentos sobran, sin embargo, le avalaron la renuncia. Hoy todos los chubutenses le estamos pagando una jubilación de privilegio”, expresó la especialista.
Por otra parte, la médica lamentó que “las causas de pedofilia en Chubut son cajoneadas. Cuando un chico dice que es abusado lo hacen pasar por una máquina de tortura y lo obligan a vincularse con el agresor. Los chicos en Chubut no tienen Justicia ni derecho, ni siquiera están tomados como personas”.
Criticó asimismo el trabajo que realizan desde la Justicia en este tipo de casos: “ellos piensan que mientras menos trabajen e investigan, mejor vamos a estar. La Justicia y el Poder Legislativo son cómplices o no les interesa la infancia”.
Para finalizar, Rogers reiteró su pedido de juicio a Báez y manifestó que “espero que los diputados tengan la suficiente empatía de ver como se firmó su renuncia dejando libre a 28 violadores de niños”.