Una serie de allanamientos coordinados permitió desarticular al Clan Cabral, una organización que operaba entre la Villa 1-11-14 y La Tablada con un esquema de distribución de droga altamente estructurado.
La investigación comenzó en febrero y derivó en seis operativos simultáneos que terminaron con nueve personas detenidas, todas argentinas, una de ellas con pedido de captura por causas previas vinculadas al narcotráfico.
Llego el fin del Clan Cabral
De acuerdo con LU17.La División Investigaciones Antidrogas Zona Sur de la Policía de la Ciudad llevó adelante los procedimientos bajo la orden del Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas N°3.
Durante los operativos se secuestraron 802 envoltorios de cocaína, dosis de ketamina, balanzas de precisión, dinero en efectivo, un auto Ford Mondeo, municiones, celulares y elementos utilizados para fraccionar y empaquetar los estupefacientes.
Los registros se realizaron en distintos puntos del asentamiento porteño y en un domicilio de La Tablada ubicado en Coronel Pringles al 4700, donde también se hallaron drogas y documentación relevante para la causa.
¿Qué les fue incautado?
Parte de los elementos incautados incluía cuadernos con anotaciones y planillas utilizadas para llevar el control de las ventas.
La banda tenía base operativa en el Barrio Illia, con puestos de venta y sectores utilizados para acopio y distribución, según se desprende de las tareas encubiertas, los registros fílmicos y los relevamientos efectuados por personal especializado.
Una de las características que permitió identificar a esta organización fue su método de empaque: utilizaban clips de abrochadora para cerrar los envoltorios.
Operaban sobre la calle Charrúa y alrededores con campanas, satélites y distribuidores, explicaron fuentes policiales.
La investigación, iniciada hace más de cinco meses, permitió reconstruir el circuito de comercialización del clan, su jerarquía interna y el modo en que se camuflaban en la dinámica barrial.
Las escuchas y las filmaciones fueron claves para vincular a los sospechosos con el delito.
Entre los elementos hallados se secuestraron también municiones, lo que refuerza la hipótesis de que la banda estaba dispuesta a resistir eventuales irrupciones.
Hasta el momento no se detectaron armas de fuego, aunque las pericias continúan.
El operativo tuvo una fuerte presencia territorial y se realizó sin incidentes, según indicaron desde la fuerza de seguridad.
Los detenidos fueron trasladados a dependencias judiciales, donde se los notificó de las imputaciones. La causa continúa en trámite y podría tener nuevas derivaciones.