El Ministerio de Seguridad de la Nación implementó un nuevo protocolo específico para la toma de muestras de ADN en escenas del crimen, destinado a estandarizar los procedimientos de las fuerzas policiales y de seguridad federales.
La medida, establecida mediante la Resolución 1061/2025, busca garantizar la validez jurídica y la integridad de la evidencia genética recolectada.
Estándares técnicos y cadena de custodia
Según la información publicada en el Boletín Oficial, el nuevo protocolo permite a las fuerzas federales «cumplir con los estándares legales de custodia, integridad y confidencialidad de la evidencia genética». La resolución destaca que «la especificidad, sensibilidad y valor identificatorio del ADN lo convierten en un elemento probatorio de importancia para la reconstrucción de los hechos, la individualización de los presuntos autores y la desvinculación de personas ajenas al delito». Para asegurar la trazabilidad, se implementó una planilla de cadena de custodia de muestras biológicas con requisitos formales que garantizan su validez jurídica.
Complementariedad con protocolos existentes
El nuevo instrumento no reemplaza al protocolo anterior de 2021, sino que lo complementa, según explicaron desde el Ministerio de Seguridad. Mientras el protocolo previo aborda la actuación científica en términos generales, el actual se enfoca exclusivamente en el tratamiento de muestras biológicas con potencial genético, permitiendo una mayor especialización y precisión técnica. Ambos deben aplicarse de manera articulada, según lo establece la resolución firmada por la ministra Patricia Bullrich.
Impacto en la investigación criminal
La implementación de este protocolo, permitirá estandarizar los procedimientos en todas las fuerzas federales, garantizando la validez jurídica de las pericias y asegurando la eficacia probatoria del material genético recolectado. La medida fortalecerá las capacidades de investigación en delitos complejos, búsqueda de personas extraviadas y individualización de presuntos autores, mediante un manejo que se ajusta a correctas prácticas científicas desde la recolección hasta el análisis en laboratorios acreditados. Información extraída del medio C5N.