El rechazo amoroso repetido no solo afecta las emociones: investigaciones científicas demostraron que activa las mismas áreas del cerebro asociadas al dolor físico.
La psicología explica por qué se siente tan intenso y cómo superar sus efectos.
Estudios de la Universidad de Columbia y el Albert Einstein College of Medicine confirmaron que el rechazo romántico estimula circuitos cerebrales similares a los de una adicción. Según la revista Journal of Neurophysiology, este proceso se asemeja a un “síndrome de privación” que impacta directamente en la autoestima.
Cuando los rechazos se vuelven reiterados, dejan de ser hechos aislados para convertirse en señales de conflictos internos. El cerebro los interpreta como amenazas emocionales, lo que explica la intensidad y persistencia del dolor.
La herida del rechazo
La terapeuta Lise Bourbeau sostiene que esta experiencia suele tener raíces en la infancia. La falta de aceptación en etapas tempranas genera la idea de no merecer amor, lo que influye en la vida adulta.
La psicóloga Ximena Fuentes agrega que esto conduce a conductas perfeccionistas en busca de validación constante.
Por su parte, John Bowlby, creador de la teoría del apego, explicó que el apego ansioso se relaciona con una crianza inconsistente, lo que provoca miedo al abandono. En contraste, el apego evitativo surge de cuidadores distantes, llevando a evitar la intimidad y generando una profecía autocumplida: alejar a los demás antes de ser rechazados.
Consecuencias en la vida afectiva
De acuerdo con el psicólogo José de Sola, estos estilos de apego condicionan la forma de relacionarse en la adultez. Ya sea por necesidad excesiva de cercanía o por distancia emocional, ambos patrones suelen obstaculizar vínculos sanos y profundos.
Cómo afrontar el rechazo y sanar
La psicóloga Patricia Ramírez propone cuestionar los pensamientos automáticos negativos y dar un nombre al “crítico interno” para restarle poder. Este ejercicio ayuda a reconocer que esas voces no son verdades absolutas.
Especialistas de KidsHealth y la Clínica Mayo recomiendan fomentar el autocuidado, practicar actividades placenteras y reforzar la autoestima. Para la psicóloga Silvia Congost, el amor propio y los límites claros son pilares fundamentales para establecer relaciones saludables.
La exposición gradual a situaciones de bajo riesgo, junto con la ayuda profesional, facilita el proceso de superar la herida del rechazo y abrirse a nuevas experiencias.
Un tema que interpela a todos
El rechazo forma parte de la vida emocional, pero entender su origen y cómo opera en el cerebro permite afrontarlo con mayor fortaleza. Según Ámbito, el acompañamiento psicológico y el trabajo en la autoestima son claves para dejar atrás patrones que condicionan el amor.




