Cientos de seguidores de Jair Bolsonaro tomaron las calles de Brasilia este martes para exigir la amnistía del expresidente, condenado recientemente a 27 años de prisión.
Vestidos con los colores de la bandera brasileña, los manifestantes corearon consignas frente al Parlamento en la primera movilización masiva tras el fallo judicial.
La marcha hacia el Congreso brasileño
La movilización convergió en el parlamento brasileño, donde los simpatizantes bolsonaristas urgieron a los legisladores a aprobar un proyecto de amnistía que evite que su líder cumpla la condena. Desde un bus con altoparlantes, el senador Flavio Bolsonaro, hijo del expresidente, arengó a la multitud: «Vamos a caminar juntos para que el Congreso oiga nuestra voz. (…) Estamos a un paso de lograr aprobar esa amnistía«.
La condena y la situación actual de Bolsonaro
Jair Bolsonaro, de 70 años, fue hallado culpable de conspirar para impedir la asunción del presidente Luiz Inácio Lula da Silva tras las elecciones de 2022. Actualmente se encuentra en prisión domiciliaria desde agosto, medida que se decretó por un presunto intento de obstruir el juicio en su contra. Además, tiene prohibido expresarse en redes sociales, según confirmaron fuentes judiciales.
El proyecto de amnistía que pierde fuerza
Aunque la cámara baja aprobó a finales de septiembre una moción de urgencia para el proyecto de amnistía, la iniciativa ha perdido impulso tras multitudinarias protestas en su contra. Según la información proporcionada por la agencia de noticias DW, en su versión más reciente el proyecto contempla apenas una reducción de pena y aún no tiene fecha definida para su votación en el plenario del Congreso.
El contexto político internacional
La causa bolsonarista enfrentó otro revés a nivel internacional con la reciente conversación telefónica entre Donald Trump y Lula da Silva. El expresidente estadounidense, principal aliado internacional de Bolsonaro, había impuesto en agosto aranceles del 50% a Brasil argumentando una «caza de brujas» judicial contra el líder brasileño. Sin embargo, ahora parece abrir espacios de diálogo con el gobierno de Lula, marcando un cambio significativo en el escenario geopolítico. Información extraída del medio DW.