Meta anunció que desde el 16 de diciembre de 2025, las conversaciones de los usuarios con su asistente inteligente, Meta AI, serán utilizadas para personalizar los anuncios en Facebook e Instagram.
La medida, que busca integrar la inteligencia artificial al modelo publicitario de la compañía, reaviva el debate global sobre la privacidad de los datos, según TN.
El nuevo sistema permitirá que los temas tratados en las conversaciones con Meta AI —ya sean por texto o voz— se integren al motor de segmentación publicitaria.Por ejemplo, si un usuario conversa sobre recetas o comidas, podría empezar a ver anuncios de supermercados, electrodomésticos o restaurantes.
Además, la actualización alcanzará otros productos impulsados por IA, como las gafas Ray-Ban Meta, la herramienta de generación de imágenes Imagine y la función de video Vibes.Con este paso, la compañía de Mark Zuckerberg busca recuperar las millonarias inversiones realizadas en desarrollo de modelos de lenguaje e infraestructura tecnológica.
Un cambio sin opción de exclusión
A partir del 7 de octubre, los usuarios recibirán una notificación sobre la modificación en la política de privacidad. Sin embargo, Meta confirmó que no habrá opción para excluirse del nuevo sistema de personalización.
El cambio se implementará a nivel global, excepto en la Unión Europea, Reino Unido y Corea del Sur, donde las normativas de protección de datos son más estrictas.
Qué tipo de información no será usada para publicidad
Meta aseguró que las conversaciones sobre temas sensibles quedarán fuera del alcance publicitario. Entre ellas: religión, orientación sexual, salud, opiniones políticas, origen racial o creencias filosóficas.
En el caso de WhatsApp, los diálogos con Meta AI solo serán considerados si el usuario vincula su cuenta al Centro de Cuentas de Meta. Las conversaciones cifradas seguirán siendo privadas y no se usarán para anuncios.
Privacidad vs. personalización: un debate que crece
La medida reabre el debate global sobre los límites entre la utilidad de la inteligencia artificial y la privacidad de los usuarios.
Mientras Meta argumenta que la personalización mejora la experiencia digital, los defensores de la privacidad advierten que la línea entre “asistente inteligente” y “herramienta publicitaria” se vuelve cada vez más delgada.
Las grandes tecnológicas, en su búsqueda por nuevos modelos de negocio, comienzan a ver en la inteligencia artificial una mina de datos sin precedentes. El desafío será equilibrar innovación y protección de la información personal.