El dolorido padre de Ariel Nicolás, el joven de 25 años asesinado en una estación de servicio de Comodoro Rivadavia, rompió el silencio y reveló detalles cruciales sobre un conflicto previo con los «trapitos» del lugar. Andrés criticó duramente la falta de avances en la investigación del crimen que conmocionó a la ciudad.
En una entrevista exclusiva con ADNSUR, Andrés manifestó su profundo dolor y frustración por la muerte de su hijo Ariel Nicolás, ocurrida en la madrugada del domingo en la estación de servicio «Rodrigo» del centro de Comodoro.
El joven de 25 años, oriundo de General Villegas pero residente en Comodoro por motivos laborales, recibió un disparo en el rostro que le resultó fatal, mientras que su amigo fue herido de bala en la espalda y permanece internado. Ariel había llegado a la ciudad apenas el jueves anterior, continuando con su rutina de viajes entre su ciudad natal y Comodoro en busca de trabajo.
El Conflicto con los «Trapitos» del Lugar
Andrés reveló información crucial sobre los motivos que podrían estar detrás del asesinato: su hijo mantenía una disputa territorial con los «trapitos» que trabajan en las proximidades de la estación de servicio. «Había una discusión porque se metían a trabajar en el lugar donde ellos limpiaban coches», contó el hombre, refiriéndose a que Ariel y sus amigos vendían medias en la zona, lo que generaba conflicto con quienes se dedican a la limpieza informal de vehículos. «Todo el mundo conoce a estos trapitos y sabe qué clase de personas son», añadió con evidente angustia.
La Versión del Ataque: Una Compra que Terminó en Tiroteo
Según el relato que recibió Andrés de uno de los sobrevivientes, el ataque ocurrió cuando los jóvenes se acercaron a un Fiat Punto rojo porque los ocupantes tenían dinero para comprar medias. «En ese momento bajaron dos del auto y comenzaron a disparar sin motivo aparente», detalló el padre. «No hubo intento de robar ni de lastimar para exigir algo, simplemente atacaron con tiros. Por eso no entiendo tanta violencia». El disparo en la cabeza a Ariel fue directo y mortal, mientras que su amigo recibió varios impactos pero logró sobrevivir.
Las Críticas a la Investigación Policial
Andrés expresó su decepción con el accionar de la justicia y las fuerzas de seguridad. A pesar de la existencia de numerosas cámaras de seguridad en la avenida Hipólito Yrigoyen, las autoridades no han podido identificar la patente del Fiat Punto rojo desde donde se realizaron los disparos. «No hay muchos vehículos Fiat Punto rojos por estos lados, todos saben cuál es», afirmó, cuestionando la falta de resultados concretos en la investigación. La familia logró reunir el dinero para trasladar el cuerpo a General Villegas, pero Andrés admitió tener pocas esperanzas de que se haga justicia: «Aunque los detengan y los condenen, eso no me devolverá a mi hijo». Información extraída del medio ADN.