El emblemático Laberinto Patagonia, ubicado en El Hoyo y reconocido como el más grande de Sudamérica, reabrirá sus puertas el 11 de octubre con una propuesta renovada que combina gastronomía, arte inmersivo y naturaleza.
Su socia gerente, Doris Romera, contó que el complejo —que cada año recibe más de 30.000 visitantes— se prepara para una temporada que promete atraer a turistas de todo el país.
Lo que nació como un desafío local entre cipreses hoy es un complejo turístico y cultural que refleja la identidad patagónica. Según explicó Romera a ADNSUR, “hay una energía especial en la Comarca Andina, una fuerza que nace de la tierra y se potencia en la colaboración entre quienes la habitan”.
Octubre florece: tulipanes, turismo y comunidad
El Hoyo vive un nuevo impulso turístico gracias a la expansión de la temporada de primavera. “Este es el segundo año que abrimos en octubre, acompañando la floración de los tulipanes”, detalló Romera. La iniciativa, impulsada desde Trevelin, abrió una ventana inédita para el turismo cordillerano, generando un circuito muy buscado que une La Trochita, los tulipanes y el Laberinto Patagonia.
“Es un plus para toda la región, una temporada intermedia que antes no existía”, destacó Romera.
Sabores de la cordillera: la gastronomía que enamora
El complejo ofrece una experiencia integral para todas las edades. Además del recorrido entre los cipreses, los visitantes pueden disfrutar de El Laberinto Café y Cidrería, un espacio que celebra la repostería patagónica y los productos locales del Paralelo 42.
“Seguimos trabajando con frutos rojos, que son el corazón de El Hoyo, la Capital Nacional de la Fruta Fina”, explicó Romera. En el menú abundan las tortas caseras, los jugos naturales y los platos que resaltan el sabor de la región.
Gal: la primera galería de arte inmersiva de la Patagonia
Dentro del parque, la propuesta cultural se amplía con Gal, la primera galería de arte inmersiva de la Patagonia, donde las proyecciones digitales transforman paredes, pisos y techos en un viaje sensorial.
Este año, el ciclo de exposiciones continúa con “El agua”, una muestra que invita a fluir y reconectarse con los elementos naturales. “Queremos que el público se deje llevar por la experiencia, que sienta y se transforme”, contó Romera, quien adelantó que evalúan llevar la propuesta a Buenos Aires.
La sidra de hielo: un tesoro cordillerano que conquista chefs
Entre los proyectos más innovadores del Laberinto destaca la sidra de hielo, una bebida artesanal inspirada en técnicas canadienses y elaborada con manzanas congeladas de El Hoyo. Creada por Claudio Levi, Fran Firpo y Lucía Romera, se trata de una rareza en Sudamérica que ya conquistó a chefs de renombre.
El reconocido Guido Tassi, del restaurante Don Julio, incorporó la sidra a su carta y la describió como “una joya patagónica”. Elaborada con métodos naturales y sin burbujas, su sabor recuerda a un vino dulce y brillante.
Los precios de las sidras varían entre $40.000 y $60.000, reflejando el trabajo artesanal de los productores locales.
Conectividad y acceso: una temporada con grandes expectativas
El regreso de más vuelos a Esquel, especialmente desde Córdoba, genera entusiasmo en el sector. “Necesitamos conectividad, porque históricamente Bariloche acaparaba todo el flujo turístico”, señaló Romera.
El Laberinto Patagonia reabrirá el 11 de octubre, con entradas generales a $18.000 y tarifas especiales para residentes y familias. Los menores de 7 años ingresan gratis, y los niños de 7 a 12 años tienen descuento.
“Queremos que sea un espacio accesible, pensado para disfrutar en grupo y vivir la magia de la Comarca Andina”, concluyó Romera.