Marcelo Gallardo realizó una autocrítica contundente después de la derrota de River ante Racing, que selló su eliminación del Torneo Clausura y profundizó un cierre de temporada marcado por la irregularidad.
Según informó Noticias Argentinas, el DT reconoció que el 2025 fue “totalmente negativo” y asumió su responsabilidad por el bajo rendimiento del equipo.
Tras el 3-2 sufrido en Avellaneda, Gallardo señaló que esta caída “puede ser una consecuencia de lo que fue el último trimestre”, reconociendo que a River se le hizo “muy difícil sostenerse como equipo”. El DT confesó marcharse “desilusionado” por la enorme diferencia entre el nivel mostrado a comienzos de año y el que exhibió en la parte final de la temporada.
El resultado dejó al “Millonario” sin chances de avanzar y sin acceso a la Copa Libertadores 2026. Para aspirar al repechaje, deberá esperar que Boca o Argentinos Juniors sean campeones del Clausura.
Autocrítica y reestructuración del plantel
Gallardo no evitó hacerse cargo del mal momento: “Es una situación incómoda y hay que hacerse cargo”, expresó. Adelantó que desde este martes comenzará a trabajar en la reestructuración del plantel profesional y en el diseño de la pretemporada.
También reconoció que se tomará algunos días para “reflexionar y revisar qué cambiar para que esto no vuelva a ocurrir”, aunque remarcó que parte de ese proceso será interno: “No me voy a desnudar delante de todos”.
El DT explicó además las modificaciones que realizó con los ingresos de los mediocampistas Matías Galarza Fonda y Juan Portillo, quienes reemplazaron a Enzo Pérez e Ignacio Fernández: “Son jugadores jóvenes y frescos que entraban por dos experimentados que ya estaban pidiendo el cambio”. Aclaró que no les atribuye responsabilidad en la remontada rival.
Falta de fortaleza mental y el golpe tras Palmeiras
Gallardo también apuntó a lo emocional. Lamentó la falta de “fuerza mental y futbolística” que arrastró el equipo luego de la eliminación ante Palmeiras por Copa Libertadores y consideró necesario “descomprimir” porque “las cabezas están demasiado cargadas”.
Antes de cerrar, fue contundente: “Este fue un año en el que fallamos, y en lo que viene no debemos fallar”.




