Luis Caputo y Federico Sturzenegger encabezan el nuevo plan de privatizaciones del Gobierno nacional.
La administración de Javier Milei avanza con una de las reformas estructurales más ambiciosas de su gestión: la venta y concesión de empresas clave del Estado. En noviembre comenzarán las licitaciones de rutas y represas hidroeléctricas, mientras se perfila una segunda etapa que incluye a firmas estratégicas como AYSA, Transener y Belgrano Cargas.
Milei acelera el retiro del Estado de la economía
El Gobierno nacional busca aprovechar el impulso político de los últimos meses para avanzar con su agenda de privatizaciones. Según fuentes del Ministerio de Economía y la Agencia de Transformación de las Empresas Públicas, en las próximas semanas se lanzarán procesos que marcarán el inicio formal del traspaso de activos públicos a manos privadas.
Las primeras licitaciones confirmadas corresponden a rutas nacionales y represas hidroeléctricas, pilares de la infraestructura energética y de transporte del país. El ministro Luis Caputo aseguró que “el sector privado invertirá, hará obras y administrará con más eficiencia mejores rutas”, destacando que el objetivo es atraer inversión sin incrementar el gasto público.
Las primeras licitaciones: rutas y represas
La llamada ruta del Mercosur, primera concesión vial bajo la gestión Milei, ya recibió siete ofertas. La preadjudicación se conocerá en un plazo máximo de dos semanas.
Por su parte, el 7 de noviembre se abrirán las ofertas para la reprivatización de cuatro represas hidroeléctricas —Alicurá, El Chocón, Arroyito y Piedra del Águila—, que podrían recaudar entre USD 500 y 700 millones.
Según el mercado, las actuales operadoras (AES Argentina, Enel, Central Puerto y Orazul) competirán no solo por renovar sus contratos, sino también por expandir su participación.
El nuevo mapa privatizador
Para lo que resta de 2025, el Ejecutivo prevé una segunda tanda de concesiones de rutas nacionales controladas por Corredores Viales, que abarcan más de 4.400 kilómetros de autopistas y accesos a los puertos del Paraná.
En simultáneo, se avanza en el proceso de venta de unidades de Enarsa, mientras que la principal transportista eléctrica del país, Transener, será ofrecida al sector privado antes de febrero de 2026.
También se evalúa la privatización parcial de AYSA, empresa encargada del suministro de agua y cloacas del AMBA, y el llamado a licitación del Belgrano Cargas entre fines de noviembre y comienzos de diciembre.
A fin de año, el Gobierno planea publicar los nuevos pliegos para la Hidrovía, eje clave para las exportaciones agroindustriales, mientras se analiza acelerar la privatización parcial de Nucleoeléctrica Argentina.
Las próximas empresas en la mira
Si bien muchas de las privatizaciones habilitadas por la Ley Bases se concretarán recién en 2026, el equipo económico ya proyecta una nueva etapa que incluiría a Arsat, Correo Argentino y Aerolíneas Argentinas, entre otras.
El propio Milei ha reiterado que su meta es “quitar al Estado de la economía”, consolidando una transformación estructural que podría redefinir el rol estatal en los sectores estratégicos.
Según informó Noticias Argentinas, los despachos oficiales ya trabajan en los documentos técnicos y en la estrategia legislativa para enviar al Congreso el listado completo de empresas sujetas a privatización durante el segundo tramo de su gestión.




