Un estudio revela que el superávit primario de las provincias cayó un 79% real en el primer semestre de 2025, con nueve jurisdicciones en rojo. La suba del gasto provincial, que creció 14% real, es señalada como la causa central de este deterioro fiscal.
El panorama fiscal de las provincias argentinas sufrió un drástico deterioro en la primera mitad de 2025. Según un informe de la Fundación Mediterránea, titulado “Por qué cayó el superávit provincial en 2025”, el superávit primario consolidado se desplomó un 79% en términos reales respecto al mismo período del año anterior.
Este fenómeno contrasta con la baja del 28% registrada a nivel nacional y dejó a nueve jurisdicciones con déficit financiero, entre las que se destacan Tierra del Fuego, Chaco y la provincia de Buenos Aires. La información central de este análisis fue difundida por la Agencia Noticias Argentinas (NA).
La clave del deterioro: el gasto provincial se dispara
El estudio identifica con claridad la principal variable que explica la caída del superávit. Tras una fuerte contracción del 25% real en 2024, las erogaciones provinciales se incrementaron un 14% real en 2025, revirtiendo gran parte del ajuste previo. Este comportamiento divergió radicalmente del gasto nacional, que continuó su senda descendente (-27% en 2024 y -1,8% en 2025).
“La suba del gasto explica la reducción del superávit provincial en 2025”, afirma el informe de manera contundente. Esta dinámica hizo que, por primera vez en el período analizado, nueve provincias registraran números rojos en sus cuentas, situación que no se observaba en 2024.
Tierra del Fuego, Chaco y Buenos Aires a la cabeza del déficit
El informe detalla cuáles son las jurisdicciones que presentaron los mayores desequilibrios en el primer semestre del año. Tierra del Fuego encabeza la lista con un déficit equivalente al 8% de su gasto total, seguida por Chaco con el 7% y la provincia de Buenos Aires con el 5,4%.
El análisis desmiente una posible justificación para estos números negativos: la inversión pública. El estudio aclara que el déficit “no se explica por más inversión”, señalando que 7 de las 9 provincias deficitarias tienen niveles muy bajos de gasto de capital. Por el contrario, varias provincias que mantuvieron un superávit elevado exhiben una proporción alta de inversión pública, indicando que la calidad del gasto es un factor determinante.
Advertencia y propuesta: la urgencia de reglas fiscales claras
Ante este escenario, la Fundación Mediterránea advierte sobre las consecuencias y plantea una salida de consenso. El informe señala “la necesidad de avanzar hacia reglas fiscales que limiten el crecimiento del gasto tanto nacional como provincial”. El objetivo de esta disciplina sería sostener la estabilidad macroeconómica y, fundamentalmente, habilitar una reforma tributaria integral en el futuro.
El estudio propone concretamente “acuerdos fiscales intergubernamentales que limiten la suba del gasto nacional y provincial a un ritmo no mayor que la inflación observada, por varios años”. Los excedentes fiscales que se generen deberían destinarse a financiar una reforma que reduzca la presión de los impuestos provinciales más distorsivos para la actividad económica.
Un futuro fiscal en la cuerda floja
El informe concluye con una advertencia clara sobre los riesgos que se avecinan. “Si en los próximos meses el gasto provincial sigue aumentando como lo hizo en la primera parte de 2025, bajarán rápidamente las posibilidades de que se produzca una reforma tributaria”, afirma el estudio.
Esta sentencia subraya la delicada encrucijada fiscal: sin un control del gasto provincial, se compromete no solo la salud de las cuentas públicas locales, sino también la posibilidad de avanzar con una reforma tributaria largamente esperada para aliviar la carga sobre los contribuyentes y fomentar la competitividad.
La evolución del gasto en los próximos meses será, por lo tanto, el termómetro clave para medir las posibilidades de un acuerdo fiscal nacional que ordene las cuentas y siente las bases para un crecimiento sostenido.




